Petroglifos, un patrimonio que no cesa de crecer en el sur lucense

Francisco Albo
francisco albo MONFORTE / LA VOZ

CHANTADA

CEDIDA

En la zona se hallaron numerosos grabados rupestres en los últimos años

06 mar 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

El hallazgo de nuevos petroglifos en el dolmen de Leira Rapada, recientemente descubierto en O Saviñao, viene a incrementar un patrimonio arqueológico que en los últimos años ha experimentado un importante crecimiento en el sur lucense. En la actualidad son cinco los municipios de la zona -además de O Saviñao, están Sober, Chantada, Carballedo, Pantón y O Incio- en los que se ha documentado la presencia de grabados rupestres prehistóricos. Los nuevos petroglifos de O Saviñao, por otro lado, presentan un diseño poco común en la zona, a base de círculos concéntricos. Con pocas excepciones, la mayoría de los grabados conocidos en este territorio son sencillas incisiones de forma circular, del tipo conocido como cazoletas o coviñas.

El arqueólogo monfortino Iván Álvarez Merayo, que localizó el dolmen de Leira Rapada, opina que si en el sur de la provincia no se conocen más petroglifos es porque no se han realizado muchas búsquedas sistemáticas. Asimismo, cree que lo más probable es que en la zona existan otros grabados con un diseño menos simple que el de las cazoletas circulares. Además de los de O Saviñao, ya conocían algunos otros de este tipo, principalmente en el municipio de Sober. «Los petroglifos más complejos se asocian normalmente con la franja atlántica gallega, que es donde más abundan, pero no tiene nada de raro que llegasen también a estas zonas del interior -dice Álvarez-, porque las principales vías de desplazamiento de esa época eran los valles de ríos como el Miño, el Sil o el Cabe y seguramente a través de ellos había una comunicación con la costa».

Desde los años cuarenta

Los petroglifos de Sober se cuentan entre los primeros que estudiaron los expertos en este territorio. Ya en los años cuarenta, el historiador lucense Manuel Vázquez Seijas mencionó los que se conservan en la parroquia de Proendos. También se conocen desde hace bastante tiempo los del lugar de Agro do Pepe, en O Incio, hoy deterioriados por grafitis.

Solo en tiempos recientes empezó a documentarse la presencia de petroglifos en otros lugares de la zona. En los últimos años se localizaron varios grupos de grabados en diversos puntos del municipio de Pantón. Entre el 2009 y el 2011 se catalogaron sendos conjuntos en las parroquias chantadinas de Vilaúxe y Pesqueiras. El año pasado, un vecino del municipio de Carballedo descubrió dos grupos de petroglifos de diseño complejo en el límite de las parroquias de Veascós y Vilaquinte. Cabe suponer que estos hallazgos no tardarán mucho en verse seguidos de otros nuevos.