Pena de cárcel por insultar a alguien en una red social o publicar su foto sin su consentimiento

La Voz

CARBALLO

La estafa, aun siendo el delito más cometido en Internet, no es el único

02 mar 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La estafa, aun siendo el delito más cometido en Internet, no es el único. Un vistazo a las redes sociales hace pensar que es probable que muchos no lo sepan, pero con el Código Penal en la mano, insultar a alguien en una red social puede suponer pena de cárcel. Los delitos más frecuentes que se comenten en Internet son estos:

Difusión

Insultar o faltar al honor. En Internet se amplifica el mensaje con la difusión que se dé de éste. Por lo tanto, insultar a una persona a través de este medio puede provocar que se agrave el delito. A lo largo del último año se detuvo a un total de ochocientas personas en España por delitos contra el honor, la intimidad y amenazas.

Intimidad

Publicar vídeos o imágenes íntimas. El Código Penal castiga la difusión de imágenes o vídeos íntimos captados en lugares «fuera del alcance de miradas de terceros». Entre otras acciones, se castiga la distribución de imágenes tomadas en el ámbito íntimo de una pareja a través de las redes sociales.

Rastreo

¿Anonimato?. Cada usuario tiene asociada una dirección de IP que es relativamente fácil de rastrear, por lo tanto no existe el anonimato. Un juez además puede requerir a un Proveedor de Acceso a Internet (ISP) los datos correspondientes al cliente que utilizó esa IP en una franja horaria concreta.

Propiedad intelectual

Derechos de autor protegidos. Enlazar o facilitar el acceso a obras sin contar con la autorización de sus propietarios es delito por los cambios introducidos en la reforma de la Ley de Propiedad Intelectual. Las páginas de enlaces a películas o series se criminalizan.

Imágenes

Utilizar cualquier foto en Internet. No se puede tampoco usar cualquier contenido que esté publicado sin la autorización de sus autores.

protección

Robar el wifi. También se castiga, por estar tipificado en el Código Penal, el acceso a la wifi de un vecino o vecinos sin tener su permiso. Aunque estén protegidas, hay quien logra burlar la contraseña. Es diferente si la red se encuentra en acceso libre.