La ONU alerta de una posible masacre de los yihadistas en una ciudad chíi de Irak

Efe

INTERNACIONAL

El representante especial de Naciones Unidas para Irak pide al Gobierno garantizar la llegada de ayuda humanitaria o evacuar a la población

23 ago 2014 . Actualizado a las 19:23 h.

El representante especial de Naciones Unidas para Irak, Nickolay Mladenov, ha pedido tomar «medidas inmediatas para evitar una posible masacre de ciudadanos» en la localidad de Amerli, sitiada por el yihadista Estado Islámico desde hace dos meses. Mladenov, expresó su «seria alarma» por los informes sobre las «condiciones inhumanas» que sufren los habitantes de esta población septentrional, mayoritariamente chiíes y de etnia turcomana.

El EI considera a los chiíes apóstatas, como también hace con perseguidas minorías religiosas como los cristianos y los yazidíes.

«La situación de la población de Amerli es desesperada y exige una acción inmediata para prevenir una posible masacre», dijo el representante de la ONU.

Rodeada de poblaciones tomadas por el EI, Amerli, a 180 kilómetros al norte de Bagdad y en la provincia de Saladino, sufre el corte del suministro de agua y comida.

Mladenov pidió al Gobierno iraquí hacer «todo lo posible» para garantizar la llegada de ayuda humanitaria a Amerli o la evacuación de la población.

«Los aliados de Irak y la comunidad internacional tienen que colaborar con las autoridades (iraquíes) para evitar una tragedia», subrayó.

Este mes, Estados Unidos comenzó a bombardear zonas del norte de Irak para frenar el avance de los yihadistas y permitir la evacuación y entrega de ayuda a los yazidíes refugiados en el Monte Sinyar. Irak es escenario de un conflicto armado, con tintes sectarios, desde junio pasado, cuando insurgentes suníes encabezados por el EI lanzaron una ofensiva en la mitad norte del país.

El EI efectuó rápidas conquistas y a finales de ese mes declaró un califato islámico en los territorios de Siria e Irak bajo su control, lo que ha movilizado al campo de batalla a numerosos milicianos chiíes.

Una milicia chií atacó ayer una mezquita suní causando la muerte a unos 70 fieles en la provincia oriental de Diyala, lo que amenazó con romper el proceso político en el país.