Las Administraciones optan pocas veces por demoler los edificios desocupados
09 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Sobre el Xeral de Vigo planea la sombra de la demolición, pero no es el único edificio construido con dinero público que puede acabar derribado por la piqueta. Si se cumplen las previsiones, no tardará mucho en caer el llamado acuario de la playa Compostela, en Vilagarcía. Diseñado por el arquitecto César Portela a mediados de los ochenta, durante muchos años fue un esqueleto de hormigón inacabado en medio de la playa urbana de la capital arousana, hasta que con el cambio de siglo se pensó en su recuperación. En el 2004 abría sus puertas como Centro de Interpretación da Ría de Arousa y desde entonces albergó exposiciones. El Concello de Vilagarcía quiere tirarlo para evitar la actual división de la playa en dos. Ha llegado a un acuerdo con Costas para hacerlo, de manera que el edificio puede caer en las próximas semanas.
La palabra derribo se asoció también al hospital Xeral de Lugo, pero por el momento resiste en pie. Lo mismo ocurre con la Casa da Xuventude de Santiago, ubicada en la plaza del Matadero, que iba a ser demolida para abrir el parque de Belvís a la ciudad. La demolición fue aprobada en abril del 2014, pero todavía no se ha llevado a cabo. Sí se derribó, en cambio, sin salir de la capital gallega, el viejo chalé de Roxos, vivienda oficial del presidente de la Xunta antes de la construcción del complejo de Monte Pío. La demolición también fue el destino, en los últimos años, de edificios como una lonja en Malpica, una plaza de abastos en Ribeira o una casa de cultura en A Illa.
En otras ocasiones es ruina el sustantivo que mejor se ajusta a la situación de algunos edificios. No faltan ejemplos de ello. El centro de interpretación de As Gándaras de Budiño, en O Porriño, concluido en el año 2002 tras una inversión de 406.000 euros y que no se utilizó nunca. La antigua cárcel de A Coruña, a pocos metros de la torre de Hércules, está también prácticamente en ruinas, y lo mismo ocurre con las instalaciones que iban a albergar el cuerpo de bomberos en Santiago.