Sinaí Giménez promueve una empresa de cobro de morosos con trabajadoras gitanas

Luis Carlos Llera Llorente
Luis Carlos Llera VIGO / LA VOZ

GALICIA

La cooperativa, que espera crear mil empleos directos, también se encargará de vigilar obras para evitar robos de maquinaria

06 oct 2014 . Actualizado a las 07:32 h.

Cientos de mujeres gitanas perceptoras de la renta de integración social de Galicia (Risga) o pertenecientes a colectivos vulnerables han creado la cooperativa llamada Cobranet, que se dedicará a cobrar a morosos que deban dinero a empresas, particulares o incluso a Administraciones. «En vez de utilizar, como otros negocios del ramo, hombres fuertes o con aspecto peligroso, nuestra empresa empleará a mujeres que ruboricen a los que deben dinero, acudiendo a comidas de empresa, domicilios o lugares donde practican su ocio», explica el empresario de Tui, Sinaí Giménez, que ha promovido la idea.

Critica que en los últimos años la Xunta ha bajado su colaboración con los movimientos sociales y representativos de la sociedad gitana, «congelando todos los proyectos de interés social, además de la poca inversión en empleo y vivienda, por no decir que es prácticamente nula» Giménez asegura que las mujeres con grandes cargas familiares «se han sentido víctimas de la discriminación social y la falta de respeto por parte de las Administraciones públicas hacia sus necesidades».

Por eso, desde la asociación Sociedad Gitana en Galicia, «viendo la gravedad de la situación», se ha puesto en marcha el proyecto, pionero en España, dedicado a mujeres con cargas familiares y pertenecientes a este colectivo vulnerable.

La cooperativa que se ha creado también abarcará otro sector de actividad, el de la vigilancia de obras públicas para evitar robos. «Buscaremos clientela entre las Administraciones públicas y de las grandes empresas que suelen dejar maquinaria sin vigilancia; también nos encargaremos de la conservación de parques y mobiliario urbano; vigilancia portuaria e incluso de playas, de montes, grandes urbanizaciones privadas», explica el promotor.

Empleos

Aunque la empresa tiene su sede social en Vigo, va a actuar en ámbito nacional a través de la oficina que se abrirá en Madrid. «Estaríamos hablando de la creación de unos mil puestos de trabajos directos», asegura Sinaí Giménez, que regenta otros negocios como venta de telefonía móvil y tecnología.

Giménez, que preside la asociación Sociedad Gitana en Galicia, describe el entorno en el que vive la etnia y que hace que haya promovido nuevas salidas laborales. Un estudio encargado por la asociación constata la grave situación que vive al menos un 74% de la población gitana en Galicia, que está compuesta por aproximadamente unas 20.000 personas. Tres de cada cuatro gitanos viven con recursos muy escasos, que dependen de ayudas sociales y del entorno familiar. Muchos de ellos reciben ropa básica para poder vestir y bolsas de comida.

Algún miembro de estas familias trabaja esporádicamente en venta ambulante, recogida de cartones, chatarra o venta de animales. «Pero los ingresos son tan pequeños que resulta imposible poder pasar del día 17 de cada mes, ya que debemos tener en cuenta que la media de integrantes de estas familias ronda las 10 personas», dice Giménez. Muchos de ellos son chabolistas y los que tienen un piso lo comparten.

El presidente del colectivo asegura que en los últimos años las administraciones obligan a desarrollar cursos de formación a madres que al no poder compaginar las clases con el cuidado de los niños pierden las ayudas, «lo que aún excluye y margina más a este grupo social».

Sinaí Giménez se queja también de la escasez de apoyos oficiales a la hora de conceder ayudas para la creación de empresas. «En el apartado de colectivos vulnerables muchas empresas optan por no solicitarlas, ya que cuesta más el papeleo que la subvención que entregan», asegura.