El alcalde de Muras pide perdón

uxía gesto / d. c. LUGO / LA VOZ

GALICIA

Las discrepancias por una finca de Issam Algnam (PP) con un concejal del BNG, al que llamó ladrón públicamente, se saldaron con unas disculpas por escrito

27 sep 2014 . Actualizado a las 17:52 h.

Muras (723 habitantes) celebrará mañana la Feira do Poldro y do Gando de Monte en su emplazamiento tradicional de la Serra da Gañidoira después de que el alcalde, Issam Algnam (PP), pidiera disculpas públicamente al concejal del BNG, Manuel Requeijo, en un documento firmado por ambos. Fue la condición impuesta por el edil nacionalista para ceder los terrenos en los que se celebraba siempre la feria y que su familia adquirió el pasado verano.

El curioso documento es un contrato de cesión del terreno para la feria, que recoge algo más: las disculpas del regidor por haber entrado en la finca de la familia de Requeijo sin permiso. Y además, el alcalde se retracta públicamente de sus declaraciones en el discurso inaugural de la aldea etnográfica de Carelle Grande este verano. En ellas, además de comentarios de tinte racista, llamó ladrón al concejal nacionalista, en referencia a la labor que desempeña el concejal en la Fundación Secretariado Gitano. «Sabéis que los gitanos tienen mala fama, pero hay alguien que roba a los gitanos, y este es el concejal del Bloque de Muras. Porque él gasta 7 millones en normalizaciones lingüísticas para los gitanos, y de esto van tres para bocadillos para los gitanos, y el resto, al bolsillo», dijo el alcalde por megafonía.

El concejal tenía pruebas de esas acusaciones, que podrían amparar una querella. Pero Issam Algnam admitió en el contrato de cesión de los terrenos firmado el jueves que sus palabras fueron malinterpretadas y que nunca dijo que el nacionalista fuera un ladrón o se hubiera apoderado de dinero. «He dicho y reitero -señala en el documento en el que aparece su firma- que es una fundación, de la que el forma parte, la que gestiona un dinero desproporcionado y sin un fin concreto». Y añade: «Reitero que no me he referido nunca a él como persona».

El acuerdo pone fin a esa polémica, pero mantiene ramificaciones por las denuncias presentadas. El concejal denunció al alcalde por coacciones, después de que, según su versión, se pasara diez días merodeando por su finca, en la que llegó a meter un camión y una excavadora.

En esta semana la Guardia Civil tuvo que acudir en varias ocasiones a los terrenos en los que se celebrará la feria de mañana y que fue cerrada por el nuevo propietario con una alambrada, que el alcalde quería derribar.

La familia del concejal compró hace meses la finca en la que se celebra la feria desde siempre en el Alto da Gañidoira. Advirtió al alcalde que solo permitiría el uso si se lo pedía por escrito legalmente y se disculpaba de sus insultos. Requeijo quería evitar que hubiera algún accidente en el transcurso de la feria de ganado, del que se pudiera responsabilizar al propietario, y no buscaba compensación económica por su uso.