El exdirector de Aquagest en Galicia fue detenido al volver de Colombia

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GALICIA

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La jueza pone en libertad al exconcejal del PP Ángel Espadas (exasesor de Conde Roa) tras abonar una fianza de 10.000 euros

05 abr 2013 . Actualizado a las 20:19 h.

El que fue director territorial de Aquagest en Galicia, Henry Laíño López, fue detenido ayer en el aeropuerto madrileño de Barajas por orden de la jueza lucense, Pilar de Lara, en el marco de la operación Pokémon. Este apresamiento se produce porque los investigadores manejan abundante información según la cual este hombre sería clave en el entramado que es objeto de pesquisa y que afecta principalmente al Concello de Santiago. Mientras, ayer quedaba en libertad Ángel Espadas, exjefe de gabinete de Gerardo Conde Roa cuando era alcalde.

Espadas salió anoche de la prisión de Teixeiro, donde estaba recluido desde el 14 de febrero tras su detención en la operación Manga (secuela de la Pokémon). La jueza emitió ayer el auto de libertad. El abogado del detenido había solicitado la excarcelación hace varios días. La instructora lo dejó libre pero mantiene su imputación y le impuso medidas cautelares: 10.000 euros de fianza, comparecencia semanal en el juzgado y prohibición de salir de España.

En declaraciones a La Voz, Espadas evitó aludir a los motivos por los que fue detenido, aduciendo el secreto de sumario, y se limitó a afirmar que «estoy convencido de no he hecho nada ilegal». El exasesor de Conde Roa, que también fue concejal, está acusado de tráfico de influencias, cohecho y utilización de información privilegiada, supuestamente en relación con las negociaciones de contratos del Concello de Santiago.

Tras permanecer los dos primeros días aislado en el módulo de ingresos del penal de Teixeiro, Espadas estuvo siempre en la enfermería de la cárcel por sufrir una depresión. Anoche dijo que se encontraba «anímicamente roto» y agradeció el apoyo de su familia, amigos y todas las personas, más de cien, que el 23 de marzo se concentraron en su barrio, el de San Lázaro, para reclamar su puesta en libertad y la de José Luis Míguez, el exgerente de Aquagest en Santiago, concesionaria del servicio de agua, detenido el mismo día en la operación Manga y liberado el pasado 28 de marzo con las mismas medidas cautelares.

La jueza relaciona a Espadas con una trama de presunta corrupción para favorecer a empresas del grupo Véndex, a Aquagest y a la catalana GRS Arc Local.

La detención de Laíño fue debida a que, a medida que fue avanzando la investigación, y sobre todo tras las declaraciones efectuadas en el juzgado la jueza acumuló cada vez más información que apuntaba a que esta persona era clave. Cuando consideró que era necesaria su detención ya no se encontraba en Galicia. Su empresa, Aguas de Barcelona, a la que pertenece Aquagest, lo había destinado a América para representarla en Colombia. Esa marcha de España, precipitada según algunas fuentes, motivó que la jueza decidiese firmar una requisitoria y, al mismo tiempo, una orden de detención. Conocedor de esta situación, Laíño vendría voluntariamente a España, según informó la Redacción de Santiago. Nada más poner el pie en España fue detenido en el aeropuerto de Barajas por la policía.