Las pesquisas apuntan a que el sistema de pago de los favores pasaba por la entrega de dinero en el extanjero, fincas o comidas.
23 sep 2012 . Actualizado a las 13:54 h.La trama dedicada a amañar adjudicaciones en varios concellos gallegos y en otros puntos de España estaba perfectamente engrasada. Tanto, que sus componentes se habían fijado diversos apodos, y también los cometidos que tenía que cumplir cada cual. Esos motes, descubiertos durante la investigación por parte de los agentes de Vigilancia Aduanera, fueron junto al elevado número de implicados, una de las razones que provocaron que la operación se bautizara con el nombre de Pokémon, en referencia a las criaturas que rodeaban a Pikachu.
Todos en la red tenían establecidas funciones. Aseguran personas que conocieron detalles de la investigación que hay dos personas claves. Por un lado, el alcalde de Ourense, Francisco Rodríguez, y por otro el lugués Francisco Fernández Liñares. Se les denomina en la operación como los «conseguidores» o mediadores. «La mediación parece ser el nuevo negocio del siglo XXI», señaló ayer una persona relacionada con la investigación recordando también que en la operación Campeón aparecían políticos que, supuestamente, mediaban para conseguir subvenciones públicas.
Los políticos detenidos en esta ocasión serían los que, por el presunto apoyo para lograr adjudicaciones a más de una treintena de empresas que estaban dentro del entramado, recibirían contraprestaciones no solo dinerarias, sino en especie.
Entre Vendex y la Hidrográfica
El monstruo Pokémon posee dos cabezas. Por un lado, Vendex, la empresa que tiene más de una veintena de delegaciones en España y que en Galicia tiene adjudicaciones de diferentes tipos en numerosos concellos. Por otro, la Confederación Hidrográfica Miño-Sil y las adjudicaciones que se efectuaron durante el mandato de Francisco Fernández Liñares.
Aseguran que algunos de los directivos de Vendex no dudaban a la hora de abrir la mano con tal de conseguir adjudicaciones. Los investigadores peinan documentos vinculados a casi cuarenta sociedades creadas desde la matriz, alguno de cuyos responsables se encuentra detenido en esta operación. Las irregularidades no solo se limitarían a Galicia sino que alcanzarían a otras ciudades españolas, de ahí los registros efectuados en más de veinte puntos.
En cuanto a las adjudicaciones efectuadas por Liñares, hay obras de gran relevancia al menos en la capital lucense a la que acudió con frecuencia siendo presidente para dar cuenta de sus proyectos y apreciaciones.
Los documentos incautados en los registros y, sobre todo, las declaraciones que efectuaron algunos de los detenidos parecen haber aportado, según algunas fuentes, multitud de información para la jueza y los investigadores. Los registros realizados en propiedades de Fernández Liñares, no solo en Lugo, sino en la provincia de A Coruña, aportarían valiosísima información que conllevaría la práctica de más imputaciones.