Máis Galiza decidirá en marzo en una asamblea si sigue en el BNG

Mario Beramendi Álvarez
mario beramendi SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

leandro

El resultado del domingo aumenta la desafección en sectores del frente

01 feb 2012 . Actualizado a las 11:28 h.

La decimotercera asamblea del BNG ha marcado un punto de inflexión en la reciente historia del nacionalismo gallego. En clave interna, nada volverá a ser igual tras el resultado del domingo. Una cita de la que ha salido un frente partido en dos, fragmentado casi a partes iguales, sobre el que pende la amenaza de una ruptura. Es en las bases de las corrientes alternativas -Máis Galiza y el Encontro Irmandiño- donde cuaja la creencia de que el frente es irreformable desde dentro, máxime después del resultado del pasado domingo. Prueba de ello ha sido la última reunión de la dirección de Máis Galiza, que ha acordado celebrar a lo largo de marzo un congreso en el que se abordará, entre otras cosas, la conveniencia de continuar en el BNG. Esto representa un cambio significativo en el curso de los acontecimientos. La amenaza de escisión la había protagonizado hasta ahora Beiras y el Encontro Irmandiño. Ahora, muy presionado por las bases, se suma al debate su socio en la asamblea, Máis Galiza.

Dos corrientes alternativas a la UPG, que ahora forman un corpus en la nueva ejecutiva nucleado en torno a la figura de Beiras, tienen en su agenda someter a referendo la conveniencia de seguir en el frente. «Da asemblea pódese deducir que cada vez estamos máis preto de darlle a volta, pero tamén que se non o logramos agora, con 4.500 militantes votando, non o conseguiremos nunca; iso xera desencanto», revelan fuentes de las corrientes alternativas.

Estos movimientos que se producen en Máis Galiza y el Encontro Irmandiño, nada alentadores para la futura unidad del nacionalismo, surgen apenas unos días después de una asamblea que ha dejado muy vivas las brasas. Al intento de apagarlas se ha sumado el nuevo candidato del BNG a la Xunta, Francisco Jorquera, con una llamada a la conciliación y a la integración de todos para plasmar el mandato soberano de la militancia. Pero en Máis Galiza y el Encontro Irmandiño siguen también muy de cerca cada una de las palabras que pronuncia Guillerme Vázquez, reelegido portavoz nacional, quien ha insistido, en reiteradas ocasiones -ayer mismo otra vez -que ahora toca respetar el resultado democrático y pensar solo en el BNG.

Unas palabras que las corrientes alternativas interpretan como un claro indicio de que la UPG, de nuevo, volverá a aplicar la aritmética de su ajustada mayoría para asegurarse el control, pese a tener enfrente la representación de medio BNG.