El Meirás insulta al colegiado que denunció recibir improperios racistas

El Meirás, equipo de fútbol del concello de Valdoviño que milita en la Primera Autonómica, emitió ayer un comunicado en el que insulta al colegiado Jeisson Aguado Castaño, quien había denunciado la pasada semana haber sufrido graves insultos racistas en su terreno de juego. Hecho que, como adelantó La Voz de Galicia, provocó el cierre del Misael Prieto, primer campo en Galicia que es clausurado en aplicación de la Ley del Deporte del 2012, referida a la xenofobia y el racismo en el deporte.

En el escrito, remitido a clubes de Ferrolterra, instancias federativas y medios de comunicación, el club describe lo ocurrido como una «obsesión  por salir  del anonimato y lograr  protagonismo», lo que demuestra, según ellos, «un   claro síntoma del complejo de inferioridad». «Un colegiado, con un silbato y dos tarjetas, es en todo momento un dios que de repartir justicia se encarga, pero, eso sí, tal Maduro en Venezuela la justicia la entiende a su manera», apuntan.

«Prepotente y mentiroso»

En el escrito, el Meirás también califica al colegiado colombiano como prepotente. «Se dedica a imponer su mando de forma desmesurada, plantándose delante de los jugadores con un prepotencia propia de cualquier cosa, menos de alguien que debe repartir justicia».

El club de Valdoviño acusa al árbitro de mentir. «Al primer incidente le saca jugo en el acta, la cual es su Biblia, con mentiras, con calumnias propias de aquella inquisición», señalan, aunque acto seguido reconocen la existencia del incidente. «Durante el encuentro, alguien le pudo faltar al respeto, sí, y el club por primera vez en su historia echó a alguien del recinto deportivo».

Desde el Meirás, también ensalzan su trabajo a la hora de conseguir que la integridad física del colegiado no corriese peligro. «El club logró que en todo momento, como es su obligación, la integridad física no corriese ningún peligro. Pero además es que no hubo ni un solo amago de ello».

«Este hombre pudo acabar el partido sin que las fuerzas del orden hubiesen llegado. El delegado de nuestro equipo estuvo en todo momento a su lado, los directivos despejaron la zona de paso... Y aun así va y dice que ?el único que estuvo a mi lado fue el delegado del Meirás? y, pasmaros, ?la directiva no me pidió perdón en ningún momento?. Pero es que nuestro delegado es parte de la directiva... ¡Cómo se puede decir eso!», prosigue el comunicado.

 Por último, desde el Meirás no dudan en afirmar que Jeisson Aguado «no vale». «Todos los clubes de Ferrol saben quién es este individuo. El Meirás jugará el partido a puerta cerrada, pero sería conveniente que la Federación se enterase un poquito de quien es el Sr. Jeisson y el mal que le está haciendo al fútbol de esta comarca? simplemente no vale».

Negaron su color de piel

Este escrito llega casi una semana después de que La Voz de Galicia adelantara en su edición del 19 de febrero la noticia de la clausura del campo del Meirás. En esa primera publicación, el director deportivo del club, Sindo Moreira, ya mostraba ante la llamada de este diario su rechazo a la sanción. «No era un árbitro negro, no eran insultos racistas. No entendemos por qué ahora se lleva todo lo sucedido como un caso de racismo». De hecho, desde el Comité de Competición y Disciplina de la Federación Gallega de Fútbol llegaron a pedir una foto al colegio de árbitros de Ferrol para comprobar si era verdad lo que defendían desde la entidad de Valdoviño, pero al verla no tuvieron dudas.

El propio Jeisson Aguado reconoció en una entrevista exclusiva a La Voz, el 20 de febrero, que nació en Colombia y vino a Galicia con 7 años. Una publicación en la que también se reafirmó en todo lo que había escrito en el acta arbitral, denunciando que «en una zona de la grada, comenzaron insultos racistas como: «¡Mono, negro de mierda, vete a tu país!».

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