«Todos los sentimientos son útiles»

Bea Abelairas
Bea abelairas FERROL

FERROL CIUDAD

César toimil

Esta terapeuta impartirá junto a la educadora social María Antonietta Lotrecchiano un taller de comunicación emocional para adolescentes en la Biblioteca Municipal

21 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Elena González Toimil (Ferrol, 1974) está especializada en las relaciones familiares y es psicóloga deportiva, una especie de entrenadora de la mente que enseña a sus pacientes a promover su propio desarrollo personal. Tiene experiencia en no pocos talleres con padres y en febrero comienza a impartir uno sobre comunicación emocional para adolescentes junto a la educadora social María Antonietta Lotrecchiano Fernándéz. Esta actividad consta de ocho sesiones que se distribuirán hasta mayo. Las inscripciones ya están abiertas.

-¿El taller está dirigido a chavales con problemas para relacionarse?

-No, precisamente este taller es para adolescentes que no los tienen. Está pensado para los de edades comprendidas entre los 14 y los 18 años que quieran mejorar su conocimiento sobre su mundo emocional. Muchas veces los problemas son el resultado de la ausencia de un trabajo en este campo. No son capaces de regular sus estados de ánimo.

-Las primeras sesiones son para explicar para qué sirve la educación emocional...

-En primer lugar ayuda a las personas a comprender cómo funcionan. Por ejemplo, a veces tenemos un malestar, pero no sabemos darle nombre o no somos conscientes de qué nos está pasando. También sirve para explicar las razones por las que algunas personas se enfadan, razones que a veces no comprenden ni ellos mismos. Saber qué estoy sintiendo, de dónde viene y cómo debo manifestarlo es muy importante. Para los menores es útil, porque les ayuda a comprender, por ejemplo, que si están enfadados con sus padres y no les transmiten lo que sienten, solo su rabia, pues realmente nunca van a conseguir lo que desean.

-¿Por qué se enfadan más los adolescentes?

-Es una etapa de cambio en la que se pasa por una transición en la que a veces la personalidad parece la de un niño y en otras ocasiones la de un adulto. También comienzan las primeras relaciones y pueden estar muy enamorados, con lo que eso supone para subir o bajar el ánimo.

-¿Qué estrategias sirven para sobrellevar esa época?

-Primero el curso tiene una parte teórica, que puede parecer un poco fea, pero que en realidad es reveladora, porque les enseña a saber qué está pasando. En cualquier caso, el taller será muy participativo para que ellos puedan expresarse y sentirse cómodos en todo momento. La idea es llevarlos a un punto en el que reflexionen para que conozcan de dónde surgen sus emociones.

-¿Cómo es la experiencia de otros talleres?

-Este es el primero que organizamos centrado en adolescentes, pero hicimos varios con padres. El funcionamiento será similar, la penúltima sesión consta de una aplicación práctica en la que se expondrán casos personales para analizar qué ocurrió en cada momento. También habrá ejercicios en los que ellos podrán simular alguna situación. En este caso, además, me acompaña una educadora social para llegar más a cada participante.

-¿Les falta educación emocional a los adolescentes?

-Muchísima, para empezar no tienen ni el vocabulario para explicar sus sentimientos, cuando se les pregunta solo saben decir bien o mal. Cuando deberían saber identificar si están ilusionados, esperanzados o angustiados. A partir de ahí hay que cambiar eso de ver algunos sentimientos como algo que nos sobrepasa, como algo que necesitamos eliminar, cuando es algo natural.

-¿No se debería luchar para eliminar ningún sentimiento?

-Todos los sentimientos son útiles y tienen su momento, lo que ocurre es que a veces surgen cuando no toca y en otras ocasiones no los canalizamos bien para que sean efectivos.

La actividad. «Comunicación emocional para adolescentes: así me sinto, así me relaciono» se impartirá en el tercer piso de la Biblioteca Municipal de la plaza de España de febrero a mayo.

De 14 a 18 años. Las inscripciones ya se pueden realizar en la propia sala de lectura. Más información en el teléfono 98 1 94 4 182.