La policía rumana calcula que Sergio Morate podría estar en España antes de que acabe el mes

Colpisa MADRID

ESPAÑA

ADRIAN PICLISAN | Efe

Los agentes tienen el coche del presunto asesino bajo custodia desde el momento del arresto para preservar el valor de las pruebas

16 ago 2015 . Actualizado a las 20:39 h.

El comisario rumano que coordinó la detención de Sergio Morate en Lugoj y que actúa de enlace con la policía española calcula que el presunto asesino de las jóvenes Marina Okarynska y Laura del Hoyo podría estar en una prisión española incluso antes de que termine el mes de agosto.

Dan Stoicanescu señaló este domingo a TVE que, «si todo va bien», los tribunales rumanos podrían autorizar la entrega a España del presunto autor del doble homicidio antes de que finalice la orden de prisión provisional que tiene en la actualidad, que se agota el 29 de agosto.

La orden de prisión preventiva la dictó el viernes pasado la Corte de Apelación de Timisoara para garantizar que Sergio Morate estará a disposición de la justicia rumana cuando, en los próximos días, reciba la documentación que ultima el juez instructor de Cuenca, con la que reclamará la entrega del presunto homicida en el marco de la orden de detención europea que emitió el jueves de la semana pasada y que, solo unas horas después, permitió a una unidad de asalto realizar el arresto en el bloque de apartamentos de Lugoj en el que se ocultaba el prófugo.

La Corte de Timisoara dictó una orden de prisión con una duración de quince días porque, al tiempo, fijó la posible vista para decidir la entrega a España del sospechoso el 28 de agosto. Sin embargo, las autoridades rumanas ya han mostrado su disposición a acelerar esta vista si tienen toda la documentación necesaria antes de esa fecha. La única duda que queda por despejar, y que podría retrasar las entrega algún día más, es si Sergio Morate se opondrá a su traslado a España y agotará los recursos contra la decisión. En la primera comparecencia ante la justicia rumana dejó abierta esta posibilidad cuando dijo no querer ir a una prisión española porque temía por su vida.

Celda compartida

Mientras se resuelven los trámites judiciales, el presunto asesino ocupa una celda compartida con otros dos presos de confianza en el depósito carcelario que hay junto a las instalaciones centrales de la Policía en Timisoara. El comisario Stoicanescu indicó que Sergio Morate, desde el mismo momento de su detención, está «muy tranquilo» y que «ha colaborado» en todo momento con las exigencias que se han hecho.

El mando policial que desde el primer momento ha coordinado todas las actuaciones para la detención y entrega del presunto homicida con sus homólogos españoles también aseguró que, desde el mismo día del arresto, tienen perfectamente guardado y custodiado el Seat Ibiza verde con el que Morate huyó de España para preservar las posibles pruebas que contiene y asegurar su posterior validez judicial.

La Policía Científica espera hallar en el vehículo restos e indicios que permitan demostar que fue el automóvil en el que trasladó los cadáveres de las dos jóvenes hasta el humedal del río Huéscar en que los enterró en cal viva después de prenderlos fuego.

El amigo rumano de Morate admite que le confesó el crimen pero que no le creyó

Istvan Horvath, el ciudadano rumano acusado de ayudar a ocultarse en Rumanía a Sergio Morate, aseguró que éste le contó que había matado a su exnovia pero que no le creyó

«Al día siguiente (de llegar a Rumanía) me contó que había matado a Marina (Okarynska). No le creí, le dije que intentaba impresionarme», dijo Horvath. «No le creí, por eso no advertí a la policía», insistió. Horvath había alquilado el apartamento donde fue detenido junto a Morate el jueves.

Ambos se conocieron en la cárcel en España y asegura que Morate se puso en contacto con él recientemente. «Me envió un mensaje y me dijo que había hecho algo. Luego, me llamó y me dijo que estaba perdido por algún lugar en Austria, pero sin decirme nada más. Fui a buscarlo a Hungría y me lo traje a Rumanía», explicó.