Pescanova busca «in extremis» el apoyo bancario al plan de Damm

Manoli Sío Dopeso
M. Sío Dopeso REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Accede a bajar la quita para que los acreedores recuperen 1.000 millones

08 abr 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Pescanova vive horas vitales para su futuro. El tiempo para que al menos el 51 % de la deuda acreedora (3.600 millones) se adhiera a la oferta de convenio que suscribe la propia compañía, a propuesta de la cervecera Damm y el inversor Luxempart, se agota el 15 de abril sin ninguna garantía de que el plan salga adelante.

Con la alternativa de la liquidación cada vez más cerca, y la posibilidad de que, llegado ese momento, los principales acreedores financieros (Sabadell, Popular, NCG, Caixabank y BBVA) se queden con la compañía y hagan valer su propio plan de rescate, en el que ya no estaría Damm, el presidente de Pescanova, Juan Manuel Urgoiti, (puesto en el cargo por el grupo catalán que controla el consejo) llamó a los bancos en busca de un acuerdo in extremis.

Aunque desde el lado financiero se negó hasta el último momento la vuelta al diálogo, ayer ambas partes hablaron porque, entre otras cosas, sobre la mesa se puso la gran pretensión de la banca: recuperar un tercio de la deuda, es decir, 1.000 millones de euros, lo que supone una rebaja en la quita, que ahora se situaría en torno al 70 %.

En realidad, lo que planteó Urgoiti es la vuelta a la oferta inicial de Damm, negociada y acordada en un primer momento con los bancos, y sin embargo desaparecida en el texto del convenio remitido el juez, lo que provocó un gran enfado porque, de ese modo, las entidades veían reducida a 700 millones la deuda recuperable. Fuentes conocedoras de las conversaciones explican que, a pesar de que el texto del convenio es inamovible a estas alturas, el margen de negociación de la quita se centraría en las filiales españolas del grupo, cuya deuda, en un porcentaje muy alto (hasta el 70 %), está en manos de los cinco bancos que están negociando.

La banca no se fía

Horas antes de la reunión con Urgoiti, las entidades acreedoras de Pescanova mantuvieron una reunión con el administrador concursal de la pesquera, Deloitte, para explicar el plan de rescate alternativo de los bancos en el caso de que la propuesta de convenio no logre adhesiones suficientes. Esta opción contempla una inyección de capital de 115 millones de euros y la reestructuración de la deuda de las 12 filiales sin necesidad de acudir a la Ley Concursal, como propone la oferta de convenio de Damm, que la propia Deloitte valoró positivamente en un informe al juez.