Emesa reduce al 25 % la plantilla de la nave de Coirós en solo cuatro años

Toni Silva A CORUÑA / LA VOZ

ECONOMÍA

El comité denuncia otros 46 despidos, con lo que quedarán 74 empleados, cuando eran 319 en el 2009

30 nov 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

La empresa Elaborados Metálicos Emesa, perteneciente al Grupo Isolux y ubicada en el polígono de Coirós (A Coruña) va casi a un ERE por año. El comité de empresa acaba de denunciar el inicio de un procedimiento para despedir a 46 trabajadores y un expediente de regulación temporal que afectará a otros 59 empleados durante año y medio. Los portavoces de la trabajadores denuncian que la medida se suma a otras similares llevadas a cabo durante los tres últimos años, con el resultado de 120 despidos y un expediente de regulación temporal (ERTE) que afectó al resto de la plantilla durante 26 meses. De este modo, en solo cuatro años se pasará de 319 a 74 empleados, es decir, la plantilla inicial quedará reducida a algo menos de un 25 %.

«En marzo del 2011, tras dos ERTE, echaron a 86 trabajadores. Luego hubo otro ERTE y después un ERE, con 14 más. Y después, 22 sin expediente», indica Juan Naveira, del comité de empresa. «Toda esta retahíla de expedientes nos ha dejado sin cobertura social, como prestaciones por desempleo», señalan los trabajadores, que aseguran que las drásticas medidas están orientadas a la precarización de las condiciones de trabajo «y tienen como único objetivo cambiar contratación estable por becarios y por contratos temporales a través de empresas de trabajo temporal con contratos basura, algunos con una duración inferior a quince días». «No se entiende que hagan todo esto, nos tengan en esta situación, echen a compañeros y luego el Grupo Isolux, al que pertenecemos, haga la obra de la ampliación del Hospital A Coruña subcontratando a otra empresa», añade Naveira.

Protestas

La plantilla ha anunciado movilizaciones y huelgas, entre el 2 y el 20 de diciembre. Trabajarán de siete a ocho de la mañana y de dos a tres de la tarde. «Pero de ocho a dos estaremos en huelga», avanzan. Las protestas de los trabajadores de Emesa se remontan al 2010. Ya entonces la empresa justificó las medidas de ajuste para garantizar la viabilidad, «para lo cual se nos exigió que, además de los despidos y la regulación sufrida, aceptásemos una congelación de nuestros salario». Por eso el anuncio de Emesa de nuevos ajustes y despidos ha soliviantado a la plantilla.