La reforma laboral deja sin convenio a 40.000 trabajadores gallegos

Mario Beramendi Álvarez
mario beramendi SANTIAGO / LA VOZ

ECONOMÍA

Ha vencido el plazo de un año de prórroga para renovar las condiciones

09 jul 2013 . Actualizado a las 13:13 h.

El límite de un año de prórroga automática que concedió la reforma laboral a los convenios denunciados y que estaban pendientes de renovación, un período conocido como ultraactividad, quedó sin efecto ayer en el conjunto de España: 1,8 millones de trabajadores se quedan sin convenio, según datos aportados por las centrales sindicales, una situación que afecta desde el lunes en Galicia a 40.000 trabajadores, tal y como informó ayer el Consello Galego de Relacións Laborais (CGRL). El organismo público sostiene que se trata de 36.000 empleados que estaban bajo el paraguas de 25 convenios sectoriales, a los que hay que sumar otros 4.000 bajo protección de 54 convenios de empresa.

El escenario que se abre ahora es complejo. La aplicación estricta de la nueva y controvertida normativa laboral aprobada por Rajoy establece que, en ausencia de convenio de empresa, se acogerán al de ámbito superior o sectorial y, de no existir, al Estatuto de los Trabajadores, el marco que recoge los derechos mínimos que deben respetarse para cada empleado. En cualquiera de los dos escenarios, los trabajadores están abocados a un empeoramiento de las relaciones laborales: pierden los avances logrados en materia salarial, jornadas y libranzas. Los datos que maneja la CEOE revelan que un 68 % de los convenios firmados en España tras la reforma laboral disponen de algún tipo de cláusula que prorroga la vigencia de los derechos de los empleados más allá del año que marca el límite de la ultraactividad -que afecta a 1,8 millones de trabajadores en España- un dato que, según la patronal, muestra que el clima de diálogo y negociación está vivo.

La situación gallega

En datos hechos públicos ayer en Santiago, Demetrio Fernández, presidente del Consello Galego de Relacións Laborais, avanzó que en el primer semestre de este año, un 89 % de los convenios firmados en Galicia «contemplan a súa propia ultractividade, o que supón unha garantía de prórroga dos mesmos ate que sexan reemplazados ou renegociados», una realidad que el máximo responsable del organismo calificó de positiva. La radiografía trazada ayer por el CGRL muestra una dinamización de la actividad negociadora pero como contrapunto negativo está la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores. «O incremento salarial pactado ata o mes de xuño foi do 0,72 %, mentres que o IPC atópase en valores do 1,8 %», precisó ayer Demetrio Fernández, que expuso que se trata del aumento de sueldos pactado más bajo en 20 años, desde que hay registros.

En relación directa con esta situación está la constante bajada -de forma más acusada desde el año 2010- de los convenios que cuentan con una cláusula de revisión salarial, mecanismo que evita la pérdida de poder adquisitivo. Mientras el aumento de salarios corre por debajo del ritmo que marcan los precios, la jornada laboral es la más alta en dos décadas, como consecuencia de la crisis, y se han acordado en los convenios 1.792 horas anuales de media.