Toda la banca pagará las acciones por las que se canjearán las preferentes

Rubén Santamarta Vicente
Rubén Santamarta REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Las entidades harán una derrama millonaria al Fondo de Garantía, obligadas por Economía

22 mar 2013 . Actualizado a las 16:49 h.

La resaca de las preferentes provocará dolor de cabeza a alguien más que a los propios clientes. Al final, toda la banca pagará, al menos, una parte. El Gobierno ha decidido imponer una derrama obligatoria al Fondo de Garantía de Depósitos con la que compensar, en parte, a los afectados de esos productos complejos. Porque, eso sí, será siempre después de que estos asuman una quita obligatoria en su dinero, el motivo principal de la movilizaciones de estos últimos meses y una de las condiciones impuestas por Bruselas cuando se da dinero público a una entidad bancaria.

Lo que aprobará el Ministerio de Economía es una aportación extraordinaria y multimillonaria obligatoria para todas las entidades adscritas a ese Fondo de Garantía. Son más de 150 bancos, antiguas cajas, cooperativas de crédito... Prácticamente todas las que operan en España, salvo algunas filiales extranjeras. Todas pondrán un dinero, aún por determinar, según cada caso y en función de la quita final. Así incrementarán la hucha de ese fondo y comprarán parte de las preferentes.

La operativa es como sigue. Los clientes sufrirán en los próximos días una quita en sus preferentes y deuda subordinada. En el caso de NCG Banco, los 64.000 clientes que siguen pendientes de una solución perderán entre el 10 y el 55 % (estos últimos, los menos), en función del producto que contrataran. Esa pérdida se dará a conocer oficialmente esta tarde-noche, tras una reunión del FROB, el fondo de rescate bancario.

Tras esa quita, la parte que conserven los clientes no se convertirá automáticamente en dinero. Por indicación de Bruselas, se canjeará por capital, por acciones, para reforzar a la entidad. Los afectados pasarán así a ser accionistas de NCG, de Catalunya Banc y de Bankia, según cada cliente. Esas acciones, en el caso de la gallega y la catalana, no se pueden vender posteriormente, porque no cotizan. Las de Bankia, sí. Un preferentista de esta entidad podrá vender inmediatamente, aunque tiene su cruz: las acciones de la madrileña están por los suelos.

La solución para Novagalicia y Catalunya Banc es la que se articula a través del Fondo de Garantía de Depósitos. Este mecanismo de protección del cliente comprará las acciones y evitará así un problema añadido: además de la quita, el resto de los ahorros quedarían congelados.

Los bancos han conocido oficialmente esa decisión del Gobierno en los últimos días, aunque el equipo de Luis de Guindos lo tenía claro desde hace tres semanas. Pero entonces se pensaba compensar solo a los clientes de Novagalicia, porque contaba con que Catalunya Banc tuviera un comprador. Esa subasta fracasó y la solución se ha ampliado a esta última entidad.

Según las fuentes consultadas, esa derrama extra podría aprobarse esta misma mañana en el Consejo de Ministros. Tendría lógica: sería un cierto alivio horas antes de que el FROB desvele la peor parte de todo este asunto: las quitas obligatorias a los clientes.