Víctor Fernández volvió a probar con la defensa de cinco y con Cuenca y Cavaleiro en ataque

A Coruña / La Voz

TORRE DE MARATHÓN

Luis Fariña comenzó la sesión probando con los teóricos titulares, pero tuvo que retirarse al notar malas sensaciones

20 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Víctor Fernández volvió a trabajar ayer en Abegondo con la defensa de tres centrales, de cara al partido que el sábado (22 horas; Energy) jugará en Riazor ante la Real Sociedad. Un partido para el que no estará disponible Luis Fariña. El argentino comenzó la sesión probando con los teóricos titulares, pero tuvo que retirarse al notar malas sensaciones.

El técnico maño probó un once formado por Fabricio en la portería; Insua, Lopo y Sidnei como trío de centrales; Juanfran y Luisinho ocupaban los dos laterales; Wilk por delante como medio defensivo; Juan Domínguez y Medunjanin con libertad para crear fútbol; y Cavaleiro y Cuenca arriba para sorprender con velocidad y regate.

Jugadores como Alberto Lopo ya saben lo que es actuar con esta táctica, pues ya lo vivió en etapas anteriores como la de Lotina, en la que el equipo realizó una gran segunda vuelta a raíz del cambio. «A nosotros nos funcionó en aquella época, y, si el técnico se decide por ese sistema, hay gente preparada para poder hacerlo bien», comentó el catalán. «El equipo se siente más arropado, pero es un poco engañoso porque los laterales suben y se queda con solo tres atrás», añadió.

A sus 34 años, Lopo sabe de sobra cómo afrontar los partidos con este 1-5-3-2. «A la hora de defender te encuentras más arropado, pero a la hora de atacar, el equipo se abre más. Lo más importante, aparte del sistema, es que los jugadores tengan un buen día y todo salga bien», destacó.

Por encima de una táctica u otro, Lopo tiene claro que lo único importante es ganar a la Real Sociedad. «La idea es ganar cuanto antes y pegar el tirón para salir de esa zona, porque no es agradable verte abajo. Tenemos tiempo para salir de abajo y todo pasa por ganar este sábado», comentó en rueda de prensa.

«Para ellos es un aliciente y quieren ganar por tener entrenador nuevo, pero nosotros también queremos ganar, sería una alegría tremenda y, además, dejaríamos al otro equipo en la parte de abajo», indicó el catalán.

Toché también se entrenó con el grupo; mientras que Lucas Pérez y Canella lo hicieron al margen.