El Real Madrid sucumbe ante la pujanza del Athletic

La Voz

DEPORTES

ANDER GILLENEA | AFP

Un cabezazo espléndido de Aduriz premió el gran trabajo de los bilbaínos y castigó la ansiedad de un líder que ha perdido su primera plaza

08 mar 2015 . Actualizado a las 17:33 h.

El Real Madrid hincó la rodilla en San Mamés frente a un Athletic imperial, con la moral por las nubes, un orden táctico sobresaliente y un esfuerzo encomiable, y más si se tiene en cuenta su reciente esfuerzo copero. Los de Ancelotti, cada vez más cuestionados, dejaron el liderato en bandeja al Barça, y quién sabe si meten en la lucha por el título a Atlético o Valencia. Si gana al Rayo, el equipo de Luis Enrique ya verá a todos sus rivales por el retrovisor. No hay excusas para los merengues, que disfrutaron de una semana entera para preparar este duelo de campeonato tras no pasar de las tablas ante el Villarreal. No hubiera sido injusto el empate, pero les faltaron virtudes para caminar con paso firme por La Catedral.

En un feudo difícil porque el Athletic siempre achucha con el apoyo de su gente, y más tras la inyección anímica que le supuso su clasificación para la final de la Copa del Rey, Ancelotti trató de equilibrar a su equipo con Illarramendi en lugar de Lucas Silva o Khedira. Era su duda y la apuesta del técnico italiano generará controversia. Pero no sería justo culpar al guipuzcoano de la derrota y del pésimo primer tiempo completado por un Real Madrid descolocado y ansioso, sobre todo a raíz del golazo de Aritz Aduriz, a sus 34 años un tipo esencial para el Athletic. El ariete, autor ya de 10 dianas en esta Liga, marca, asiste, percute, se pelea como un jabato con todos los defensores, mete presión a los colegiados y sabe parar los partidos cuando es debido. 

MIGUEL TOÑA | Efe

A los blancos les faltó pausa, fluidez y convicción para poder penetrar entre las líneas de un equipo bilbaíno muy junto y concentrado. Sólo cuando dieron amplitud al juego y movieron el balón de un lado a otro, dificultaron la basculación a los del Txingurri de Valverde. Desde luego que este compacto bloque vasco ya no es esa banda desmadejada que pareció deambular algunos meses por el campeonato. Fuera ya de Europa, el Athletic está muy centrado. Recuerda a ese conjunto pujante que dio el do de pecho y eliminó con toda justicia al Nápoles en la fase previa de la Champions. Así, puede soñar incluso con levantar la Copa.

Kroos, tieso

Bale, Cristiano Ronaldo y Benzema estuvieron desconectados ya en un primer tiempo en el que los leones supieron cortocircuitar a Isco. Kroos trataba de mantener el tipo pero no podía. Su clase y presencia son indiscutibles pero le falta fuelle al alemán, que acusa la sucesión de partidos y el parón invernal tradicional en su país. Está tieso y por eso llega tarde, hace entradas feas y se lleva amarillas indiscutibles. Cuajó uno de sus peores partidos con el Madrid.

Con Beñat cerca de Mikel Rico y sin el sancionado San José, Valverde fue valiente y quiso que los suyos no sólo se defendieran. La rapidez de De Marcos y de un extraordinario Williams por las bandas, y los movimientos de Munian por dentro, complicaron la existencia al campeón de Europa. Los bilbaínos se fueron a buscar con osadía a los adversarios. Su rapidez, entusiasmo y persistencia, provocaron dificultades en la zaga merengue. Sobre todo, los locales entraron por el costado derecho, sabedores de que Marcelo ataca mejor que defiende. Por allí nació la gran jugada del gol. Gran centro de Mikel Rico y cabezazo espléndido de Aduriz, muy mal marcado por Pepe.

VINCENT WEST | Reuters

Bronca de Carletto

El Madrid aceleró tras la reanudación. Al parecer, hubo bronca de Carletto en el tenso descanso. El resultado le obligaba y, sobre el papel, el adversario debería dar más facilidades tras su enorme esfuerzo del miércoles en Cornellà-El Prat. Isco entró más en juego y con él malagueño en acción hubo más sensación de peligro. El Athletic cada vez defendía más atrás y podía asustar menos al contragolpe. Salía casi siempre con aventuras en solitario de Iñaki Williams, un atleta soberbio que acabó resoplando, cambiado a un cuarto de hora del final y ovacionado por una hinchada puesta en pie. No eran ocasiones muy claras, ya que siempre aparecía una pierna o una salida atinada de Iraizoz para cortar los últimos pases, pero el campo se inclinaba cada vez más. Valverde tuvo que buscar frescura en el banquillo. Antes de cambiar a Williams, retiró Muniain, ya exhausto, y poco después Ancelotti movió fichas. Fuera Illarra, dentro Jesé, los últimos días en el foco de la noticia por actitudes poco profesionales.

Nada aportó el canario. Poco más tarde, adiós a Kroos, que sufrió como nunca, y hola a Lucas Silva, intrascendente. Y por fin, descanso a Benzema y oportunidad a Chicharito. Pero no era el día. Hasta el lanzamiento lejanísimo de Bale, con Gorka adelantado, acabó en la madera. También antes un testarazo imponente de Aduriz golpeó en un poste. Tiembla el Madrid y Bilbao festeja su otra semana grande.

Ficha técnica

Athletic - 1: Iraizoz, Iraola, Etxeita, Gurpegui, Balenziaga, Beñat, Mikel Rico (Toquero, min. 91), De Marcos, Muniain (Susaeta, min. 64), Williams (Guillermo, min. 75) y Aduriz.

Real Madrid - 0: Casillas, Carvajal, Pepe, Varane, Marcelo, Illarra (Jesé, in. 71), Kroos (Lucas Silva, min. 76), Isco, Bale, Cristiano y Benzema (Chicharito, min. 80).

Árbitro: Undiano Mallenco (Comité Navarro): Mostró amarilla a Kroos, Aduriz, Etxeita, Illarramendi, Isco, Gurpegui, Marcelo.

Goles: 1-0: min. 26, Aduriz.

Incidencias: Extraordinario ambiente en San Mamés. Partido de la 26ª jornada de Liga.