Veinticuatro creadores colaboran en la muestra «MINGUaRTE»
14 jun 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Veinticuatro artistas carballeses -o vinculados con la localidad- tomaron ayer el Pazo da Cultura para compartir sus creaciones con el espectador e invitarlo a reflexionar sobre la crisis a través de ellas
Bajo el título de MINGUaRTE, la sexta edición de esta muestra colectiva convertida ya en «una cita obrigada» de los prolegómenos del San Xoán -como la definió la concejala Mar Eirís-, muestra este año su lado más reivindicativo. Los responsables de la situación que vivimos -encarnados en buitres en creaciones como las de Milagros Cotelo y Cristina Castro Santiago- y las consecuencias de sus acciones -desahucios y recortes, Mon Lendoiro; emigración, Lola Oviedo; el lujo desmedido, Juan A. Villar Casares...- comparten espacio con una puerta abierta al optimismo y a la solidaridad, como en la pieza escultórica de Fernando Mourón.
«Para construír hai que destruír primeiro», apuntó en la inauguración Lendoiro, coordinador -junto a Beatriz Fernández, comisaria- de la muestra, al tiempo que señaló que otro de los objetivos de esta propuesta es «insuflar positivismo ao público». Este, numeroso ayer, no quedó impasible ante las creaciones expuestas ni ante la intensa performance que pusieron en escena Conrado Dorado e Alba Fernández, con la que invitaron también al espectador a reflexionar sobre el abandono de la naturaleza y la deshumanización.
«A arte ten que ser libre e permitir reflexionar», apuntó el alcalde carballés, Evencio Ferrero, quien agradeció el trabajo de todos los artistas presentes y expresó su deseo de que entre todos «sexamos capaces colectivamente de superar estes momentos difíciles».
Antonio Reino, Antonio Taracido, Diana Molina, Chiña, Emilia Rodríguez de las Heras, Eva Facal, Peter Kramer, Isa Fernández, Jacobo Veiga, Manuel Eirín Nemiña, Manuel Facal, Manuel Pazos, Mónica Noya Pérez, Oti Fernández, O?Mighelo y Santiago Picos Díaz completan la nómina de creadores presentes en esta exposición, que se podrá visitar hasta finales de julio en la tercera planta del Pazo.