Estados Unidos pidió a sus diplomáticos en el 2008 investigar la posible presencia de Al Qaida y otros «grupos terroristas» islamistas en Paraguay, en la zona de la triple frontera con Argentina y Brasil, según los documentos desvelados ayer y cedidos por Wikileaks.
Washington quería información no solo de la posible presencia de Hezbolá o Hamás, entre otros grupos armados islamistas, sino también de Al Qaida y «agentes estatales iraníes».
Los cables se refieren también al presunto uso de botox por parte del líder libio Moamar el Gadafi, a quien diplomáticos estadounidenses presentan como un hipocondríaco. En los documentos hay aportaciones históricas sobre la liberación del líder sudafricano Nelson Mandela o el conflicto por las islas Malvinas, o de «las permanentes presiones que se ejercen sobre diferentes Gobiernos, desde Brasil a Turquía, para favorecer los intereses comerciales o militares de Estados Unidos».