No fue tan violento como el huracán que azotó la costa, pero el temporal de viento llegó al sur de Lugo con fuerza suficiente para derribar cientos de árboles y dejar numerosos pueblos sin luz. Los que cayeron en las carreteras dificultaron la circulación durante la mañana. En algunos lugares, la embestida del aire durante la noche fue tan fuerte como describía ayer por la tarde una vecina de A Cruz do Incio: «Tremía o piso e movíase todo como se fose un terremoto, tiven que estar media hora tendo conta da porta de entrada porque parecía que a abría». A menos altura, en el monte Marroxo, la estación que tiene Meteogalicia en el municipio de Monforte midió entre las dos y media y las tres de la mañana la racha de aire más fuerte, de 90,36 kilómetros por hora. Ayer por la tarde, ya no quedaban carreteras cortadas, pero sí algunos lugares sin luz. Este es un resumen de los efectos del temporal en las tres comarcas del sur de Lugo.
En Monforte cayeron durante la noche tres árboles en el recinto del club fluvial. Dos de ellos aplastaron el puesto de los socorristas en la piscina grande. Además, el viento se llevó una caseta prefabricada utilizada como almacén de material de obra y la aplastó contra unos árboles. También en el club fluvial, fue preciso amarrar con cadenas el sistema de captación de aguas, ante el peligro de que la crecida del río hiciese ceder el suelo en el que está apoyado. Durante la noche, en el paseo del Malecón cayeron sobre la calzada, alcanzando un coche que estaba aparcado, trozos de piedra la fachada del edificio conocido como casa del registrado. Los bomberos revisaron la fachada con una grúa y retiraron las partes que parecían más inseguras. Los bomberos también tuvieron que retirar un poste de teléfono caído sobre la carretera de Monforte a O Chao do Fabeiro; tres pinos entre este barrio monfortino y Vilalpape, ya en Bóveda; un pino más en Fiolleda; otro árbol en la calle Vilanova; y un chopo que se inclinó sobre un tendido eléctrico en Reigada. Además, operarios de la brigada de jardines podaron por la mañana las ramas de un árbol que había caído, sin causar daños, en el tejado de la oficina de turismo de la Compañía.
Por lo que respecta a O Saviñao , en Escairón volaron varias planchas del tejado del auditorio, y el Ayuntamiento tuvo que enviar personal a retirar árboles que ocupaban caminos públicos en Mourelos y Segán. Esta última parroquia, además, estuvo sin luz desde la madrugada hasta el mediodía. En la de Reiriz, seguían sin suministro eléctrico a última hora de la tarde.
En Bóveda , una plantación de media hectárea de pinos en Teilán quedó completamente destruida. Los árboles que no fueron arrancados por el viento, quedaron tronzados. Hasta primera hora de la noche estaba cortada la carretera de Bóveda a Martín y la de este pueblo a Vilalpape. En este municipio, hubo cortes de luz intermitentes, salvo en Martín, que duraron toda la mañana.
Los árboles caídos durante la noche cortaron en A Pobra do Brollón la carretera de la capitalidad municipal a Pacios de Veiga y la de A Ferreirúa a Pino. A primera hora de la tarde, seguían sin luz eléctrica las casas de la zona de Parada dos Montes y Río de Bois.
En Pantón , los árboles caídos cortaron la carretera de Moreda y la que de Reguengo a Lamaquebrada. No hubo cortes de luz prolongados, aunque en Tuiriz estuvieron sin alumbrado público por la caída de una farola. Algunas casas en estado semirruinoso de las aldeas de Eiré y Toldaos se acabaron de venir abajo a causa del vendaval.
En O Incio el viento levantó la cobertura del invernadero del colegio público y derribó numerosos árboles.
El municipio de Chantada fue uno de los más afectados por el temporal. El grupo municipal de intervención rápida tuvo que retirar los siete árboles caídos en el único acceso al pueblo de Soto, en la parroquia ribereña de Nogueira, a la que no se pudo acceder en coche hasta media tarde. También acudieron a retirar media docena de árboles en la carretera que lleva al San Lucas; otros que impedían el paso por la LU-533 entre Centulle y cerca de Limiñón; uno más en Costa y tres en Paderne, en la parroquia de Muradelle; y a cortar los dos pinos que cayeron sobre unos cables de la luz en Xillán de Arriba, un lugar de la parroquia de Requeixo que por la tarde seguía sin suministro eléctrico. Operarios de la brigada de obras ayudaron a retirar los restos de un ciprés caído sobre unos nichos del cementerio del barrio del Convento.
En Taboada , una brigada de operarios municipales tuvieron que abrir camino a primera hora de la mañana al autobús de transporte escolar, que se encontró con numerosos árboles derribados en su recorrido. En Xián fue preciso retirar hasta media docena de árboles. También hubo cortes de carreteras en A Lagoa (Cicillón), en Serén (Piñeira) y en As Seixas, donde además cayó un poste telefónico. En la aldea de Vilela, además, se derrumbó el techo de un almacén agrícola en el que había maquinaria y tractores.
En cuanto a Carballedo , el Ayuntamiento tuvo que retirar numerosos árboles, entre ellos un eucalipto de grandes dimensiones en Vilar de Monte (Santa Baia). A Barrela estuvo varias horas sin luz por la tarde.
En Ribas do Sil se produjo el único herido de la noche en el sur de la provincia. Se trata de un trabajador de Iberdrola que acudía a su trabajo en la presa de y tuvo un accidente por culpa de un árbol caído. Sufrió heridas leves. En Quiroga , el Grumir solo tuvo que retirar dos pinos en Noceda y en Pacios da Serra. En O??????Courel , Seoane, Moreda y Parada estuvieron sin luz hasta el mediodía.