Los indignados se quedan pese a las amenazas de desalojo

Elisa Álvarez González
elisa álvarez SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

El alcalde de Santiago insiste en que deben abandonar antes del martes

29 may 2011 . Actualizado a las 14:06 h.

Ni el sol de justicia que ayer calentaba las piedras del Obradoiro los hace desistir. Al contrario. Los indignados se mantienen firmes y ante las declaraciones del alcalde en funciones, Sánchez Bugallo, y del electo, Conde Roa, instando a que abandonen la plaza, los acampados del movimiento 15-M insisten en que continuarán de modo indefinido en la plaza, «e se alguén nos quere desaloxar, que non o faga con falsas escusas», explicaron en un comunicado.

Los jóvenes niegan que haya falta de higiene en la plaza, o que sean un incordio para comerciantes y turistas. Lo cierto es que un paseo por el Obradoiro, aún cuando las altas temperaturas podrían hacer aflorar malos olores, permite comprobar que no hay desorden ni descontrol en una acampada en la que todo se organiza a la perfección y de modo asambleario. «Tres cafés de la comisión de cocina para los que están trabajando», anuncia un joven mientras atiende a los periodistas.

Los indignados aseguran que no hay comercios en la plaza, por lo que no se entorpece la actividad de los establecimientos, y que los turistas, al contrario de lo que opinan los políticos, no están molestos con su presencia. De hecho, aseguran que están teniendo apoyo de muchos comerciantes e incluso donaciones, y añaden que si son desalojados, en ningún caso utilizarán la violencia. «O que lles da medo é que cada vez máis persoas se dan conta de que o que chaman os de arriba democracia é unha ficción que non nos representa».

Críticas, no obstante, las hay. El presidente de los comerciantes del casco histórico, José Manuel Bello, asegura que, aunque no están en contra, «es una protesta demasiado larga y los turistas se quejan».

El alcalde de Santiago, Sánchez Bugallo, habló ayer con el ministro del Interior, Pérez Rubalcaba, pero no obtuvo una respuesta muy clara, ya que este indicó que «hay que ser prudentes». Pese a ello, Bugallo insiste en que los indignados deben marcharse antes del martes y confía en que lo hagan, o de lo contrario reclamará medidas a la Delegación del Gobierno. Bugallo recuerda que no puede darse por buena una ocupación ilegal de una plaza pública y que la próxima semana deben comenzar en el Obradoiro las pruebas para los fuegos del Apóstol.

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