«No es elegante usar mi nombre durante un año para un cargo»

Fran espiñeira A CORUÑA / LA VOZ

GALICIA

Vázquez se declara «molesto» por el veto de un sector de su partido

01 may 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Francisco Vázquez cumplió el 9 de abril 65 años, y una semana después fue relevado de forma oficial como embajador cerca de la Santa Sede tras cinco años en el cargo. «He sido el tercero que más tiempo ha estado en el puesto del último siglo», afirma mientras exhibe parte de sus logros al frente de la Obra Pía y en la remodelación del Palazzo di Spagna. «Llegué en un momento difícil y complicado, y regreso con la satisfacción del deber cumplido, con las relaciones normalizadas una vez que las diferencias han dejado de existir y con el viaje del Papa de este verano encarrilado. Incrementé la presencia de la Embajada en la vida cultural y social de Roma y hasta los comerciantes de la zona me dieron un premio que me entregó el alcalde de la ciudad, Gianni Alemano», explica a modo de balance.

-Póngase nota en esta etapa.

-Mucha gente esperaba que fracasara. Tras 24 años como alcalde, dudaban de que un político pudiera cumplir con éxito una misión diplomática, y para mí ha sido muy gratificante demostrar que sí estaba capacitado. A los embajadores políticos se nos mira con lupa, pero en momentos muy difíciles ha quedado demostrado que un interlocutor de nivel político contribuye a solucionar los problemas de una forma mucho más rápida y directa.

-Sin embargo, parece que un sector de su partido lo veta para ser defensor del pueblo.

-Fue el presidente Zapatero el que, por mi condición de dirigente socialista católico, me encomendó la misión en la Embajada. Y he trabajado codo a codo con él y con María Teresa Fernández de la Vega. Siempre me he sentido respaldado por él, me ha escuchado y en algunas cosas incluso me ha dado la razón.

-Pero, ¿lo vetan o no?

-Yo lo que me siento es un poco molesto. No es elegante que utilicen mi nombre durante un año para un cargo como el de defensor del pueblo, que yo no he pedido y que, en todo caso, debe ser cubierto por consenso entre los dos partidos mayoritarios. Si yo suscito ese consenso y me consideran el idóneo, bien, y si no, que pase otro. Pero alguien debería explicar por qué prefieren que ocupe el puesto de forma interina una militante del PP antes que un militante socialista.

-¿Se siente abandonado?

-Insisto en que es un puesto para el que se me propone. Tengo el apoyo del presidente del Gobierno, José Blanco me lo ha dado públicamente, pero me consta que hay un sector de mi partido que se opone por mi condición de católico. Y, si reúno el consenso y no me nombran, es porque me vetan.

-¿Qué hará?

-No me marco plazos. He pedido el reingreso en la Inspección de Trabajo. Creo que es un buen ejemplo para la ciudadanía ver a políticos que llegan desde su profesión y que después vuelven a ella. A mí eso me ha dado independencia a la hora de tomar decisiones, porque nunca vi en la política un camino para hacer una carrera profesional.