La Xunta se da 20 años para llenar la biblioteca del Gaiás

m. cheda SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Cultura ha destinado 110.000 euros desde el 2009 a lotes de fondos para el complejo y está estudiando comprar tres más

28 ene 2011 . Actualizado a las 16:02 h.

En el entorno del 2031. Será entonces cuando la Xunta, según sus propias estimaciones, termine de llenar la Biblioteca de Galicia, uno de los dos edificios inaugurados el 11 de enero dentro del complejo que lleva levantando desde febrero del 2001 sobre el monte Gaiás, a las afueras de Santiago. «Calquera centro de esta clase abre cunha previsión de espazo para o crecemento. Eses 20 anos [de margen] son un estándar, aínda que a cifra podería variar en función do fluxo de ingresos futuros», aduce, por boca de una portavoz, la fundación gestora del recinto.

Construido para alojar hasta un millón de volúmenes, el inmueble apenas contiene una cuarta parte, o sea, 250.000, un 92% de los cuales se consideran de acceso restringido. El conselleiro del ramo asevera que dicho nivel de cobertura de la capacidad irá aumentando, fundamentalmente, gracias a cesiones en depósito, legados sin contrapartida dineraria, donaciones y copias gratuitas de nuevas publicaciones. No obstante, tampoco oculta Roberto Varela que, «con austeridade», si la crisis se lo permite no dudará en tirar de chequera en aquellos casos que se vean de necesidad justificada.

De hecho, desde la primavera del 2009, cuando sucedió a Ánxela Bugallo (BNG) al frente de Cultura, su departamento ha destinado 110.000 euros a adquirir, con «total transparencia», «baixo aprobación dunha comisión de expertos» y «atendendo os procedementos establecidos», diversas colecciones para el Gaiás, por ejemplo, una antigua acerca de la censura, otra de cartografía... También a través de ese comité de especialistas, en estos momentos madura tres operaciones para hacerse con sendos lotes «de interese»: documentos variados sobre los balnearios de la comunidad, material relativo a su música en las tres últimas décadas y 300 caricaturas del malogrado artista Lino González Rubido, todo ello aún pendiente de tasación.

Como pendiente de revelar sigue la inversión de su antecesora nacionalista en libros para el recinto. Hasta el 2005, Pérez Varela gastó 0,62 millones.