«Los directores del colegio jamás han hablado con nosotros»

GALICIA

La madre del niño rompe su silencio un año después de la tragedia y de conocerse la imputación de dos monitores en el caso

16 abr 2010 . Actualizado a las 15:55 h.

Días después de cumplirse un año de la muerte de Diego Novo, el niño que se ahogó en la piscina del colegio Liceo La Paz de A Coruña el 30 de marzo del 2009, el Juzgado de Instrucción número 3 de la ciudad hizo público que los únicos imputados son dos monitores del centro y no toda la cúpula directiva, tal y como demandaba la familia del pequeño. Vanesa Anido, su madre, ha decidido romper su silencio, totalmente defraudada por la decisión.

-¿Cómo se sintieron usted y su marido tras leer esta noticia?

-Fue una desesperanza total. Creo que la Justicia no trata a todo el mundo con el mismo rasero. Yo estoy segura de que si fuese un colegio de la Xunta o del Ayuntamiento sí que intentarían que pagase la Xunta o el Ayuntamiento.

-El sábado le hicieron un homenaje a Diego. ¿Eran entonces optimistas?

-Siempre fui optimista, tenía una confianza ciega en la Justicia. Nunca he tenido nada que decir, porque a mí no me importa lo que diga el colegio. A mí me influye lo que diga un juzgado y ahora ha hablado.

-¿Qué les parece la actitud del centro durante todo este año?

-Poco humana. Y nunca cercana, como quieren dar a entender en los periódicos.

-¿Cuántas veces han hablado con los directores del centro?

-Nunca. Los directores del colegio jamás han hablado con nosotros en todo este tiempo.

-¿Y el resto del personal?

-Habló con nosotros el psicólogo. Luego, su tutora nos mandó una postal en Navidad.

-Estuvieron un año en silencio. ¿Qué los ha llevado a cambiar de actitud?

-Nosotros no teníamos fuerzas para hablar en ese momento y, además, creíamos en la Justicia. Pensábamos que, por lo menos, lo intentarían. Pero ves que solo sale la parte de lo que dice el colegio, todo eso que dicen de que están muy cercanos a la familia, que nos tratan muy bien, que dan mucho apoyo a los padres y llega un momento en el que tienes que decir que todo es una absoluta mentira. Pasó un año y lo siguen diciendo. Y no, no hemos tenido ningún apoyo por su parte.

-Desde entonces, escribe un blog dedicado a su hijo. ¿Por qué lo hace?

-Para desahogarme. No es fácil sentarte al lado de tu marido y decirle que estoy desesperada porque se nos ha muerto el niño. Es mucho más fácil escribirlo sin dirigirlo a nadie que pueda llorar delante de ti.

-¿Cómo ha llevado todo esto su otro hijo?

-Imagínatelo. Menos mal que es un niño y los niños se toman las cosas de otra manera, Pero bueno, le falta su hermano.