Rodríguez Miranda admite que cobró kilometrajes de forma irregular y está dispuesto a devolver el dinero
OURENSE CIUDAD
Al igual que hiciera el pasado lunes, el diputado ourensano Antonio Rodríguez Miranda volvió a calificar ayer de «anécdota» la denuncia hecha contra él por el PSdeG sobre el cobro irregular de kilometrajes en el Parlamento gallego. El portavoz y número 3 del PPdeG porfió en que se trataba de una «cuestión puntual e anecdótica», pero a diferencia de lo ocurrido el lunes, sí admitió que cobró desplazamientos de forma antirreglamentaria e incluso se mostró dispuesto a devolver el dinero.
Los socialistas acusaron a Miranda de cobrar de la Cámara un total de 26.000 euros en kilometrajes durante la pasada legislatura, cuando tenía por costumbre viajar de Santiago a Ourense en el coche oficial de su colega José Manuel Baltar, vicepresidente del Parlamento, y que acabó convirtiéndose en el rival interno de Miranda en el último congreso del PP ourensano.
«Vou acatar exactamente a decisión que tome o Parlamento de Galicia», recalcó ayer Rodríguez Miranda, en el transcurso de una rueda de prensa que precedió a la reunión del comité de dirección de su partido en Santiago. Es más, el diputado ourensano puso de relieve que si la Mesa de la Cámara determina que debe devolver parte de la compensación recibida por los kilometrajes, «non dubiden que o vou cumplir de maneira exacta e precisa», puntualizó a preguntas de los periodistas.
Guerra sobre las cantidades
En todo caso, el portavoz de la dirección del PPdeG desmintió rotundamente la cifra de los 26.000 euros sacada a colación por los socialistas en su denuncia, que le habría supuesto unos ingresos superiores a los 700 euros mensuales solo en el cobro de kilometrajes. «Teño a conciencia plenamente tranquila», insistió Miranda, quien confía en una resolución satisfactoria de esta polémica.
En una situación muy parecida al número 3 del PPdeG se encontrarían también otros diputados que cobran de forma habitual los desplazamientos cuando comparten coches con otros colegas o bien aquellos que hacen lo propio cuando pernoctan o están afincados en Santiago.