Ningún representante de las tres grandes corrientes críticas del Bloque fue incorporado en puestos de salida en las candidaturas electorales propuestas por la ejecutiva nacionalista de la organización y que serán confirmadas el próximo 10 de enero por el consello nacional, tras la ratificación de las asambleas comarcales.
Fuentes de Encontro Irmandiño, el sector que encabeza el ex portavoz nacional, Xosé Manuel Beiras, se sienten «barridos» del mapa, después de que la organización excluyera a sus candidatos para las listas. De hecho, este sector le hizo llegar a Anxo Quintana una propuesta con ocho nombres -entre los que figuraban Concha Trigo y Ramón Mouriño por Pontevedra y Raúl Asegurado y Mónica Díaz por A Coruña- que fue rechazada de cuajo. Solo Mouriño figura en la lista pontevedresa, pero en el puesto 20 y sin opción alguna de ser diputado.
Lo mismo ocurre con los demás representantes de las corrientes críticas, que en la asamblea nacional del 2006 se alzaron con el 38% de los apoyos en el seno del Bloque. La formación Esquerda Nacionalista (EN) colocó a su máximo responsable, Xosé Chorén, de número 13 por Lugo, mientras el Movemento pola Base (escindido de la UPG) ni siquiera llegó a eso.
Solo los reconvertidos, como Xosé Ramón Paz Antón, que abandonó EN para fundar el nuevo Espazo Aberto, tiene opciones de acceder a O Hórreo, algo que le quedará lejos a la ex camilista de Ordes Charo Fernández Velho, número 10 por A Coruña.