Los técnicos de la Consellería de Traballo inspeccionarán la obra de Betanzos en la que anteayer pereció un trabajador portugués de 28 años. La Xunta investigará el accidente y comprobará si en la construcción del edificio se cumplían todas las normas de seguridad y prevención de riesgos laborales. El obrero perdió la vida tras caerle encima el ascensor.
Fuentes de la consellería detallaron que, asimismo, el departamento correspondiente revisará los contratos de trabajo de los cinco compañeros del fallecido, también de origen luso. Desde el mes de enero, un total de 837 operarios portugueses han sufrido accidentes durante su jornada laboral en Galicia o en los desplazamientos. De ellos, 41 terminaron con heridas graves y uno perdió la vida.
En la obra de Betanzos en la que se produjo el último siniestro apenas hubo movimientos ayer, aunque los trabajadores acudieron a sus puestos. Al igual que el día del accidente, el responsable de la obra impidió acercarse a la zona e incluso linsultó a los medios que tomaron imágenes desde la acera de enfrente. El Concello de Betanzos precintó la construcción en dos ocasiones por incumplimiento de la licencia, al excederse en la altura y el volumen.