El cabo que reveló fallos en el accidente de una fragata logra el amparo del Concello de Ferrol
GALICIA
Casi por unanimidad, aunque sin el respaldo del primer partido de la ciudad, el PSOE, la corporación de Ferrol hizo ayer un reconocimiento de adhesión y amparo al cabo Jorge Miguel Gago Chao, el militar que denunció públicamente negligencias de la Armada española en el mantenimiento de la fragata Extremadura , donde en diciembre del 2005 perecieron dos jóvenes al estallar una caldera. Por esa denuncia está expedientado, mientras la causa de aquel grave suceso sigue en proceso judicial.
La moción presentada y defendida por el grupo del BNG logró el apoyo del primer partido de la oposición, el PP, y de los independientes de IF. También de Izquierda Unida, que se desmarcó -por tercera vez en lo que va de mandato- de su socio de gobierno, el PSOE, que optó por abstenerse. La moción, en dos puntos, propone instar al Ministerio de Defensa para que «realice unha investigación seria e rigorosa que esclareza as causas do accidente» que costó la vida a Francisco Javier Pérez Castrillón y a Erik Noval Gómez. El segundo punto de la propuesta ratificada acuerda emplazar también al mismo ministerio a que «retire o expediente disciplinario aberto» al cabo.
El alcalde, antes del debate de la moción, pidió un receso que propiciara un pacto, en tanto que ni PP ni PSOE parecían estar de acuerdo con dicha redacción. El grupo socialista, tras una reunión de quince minutos con todos los grupos, propuso un nuevo texto algo más liviano con la Armada. En ella se «pedía e confiaba» al Ministerio de Defensa la realización de esa investigación y se omitía la referencia a la retirada del expediente al cabo.
Como quiera que el proponente de la moción, el Bloque, no accedió a cambiar una sola coma, la propuesta siguió su cauce y terminó con 15 votos a favor y 9 abstenciones (todas de los socialistas). En los bancos del pleno escucharon esa resolución casi una decena de parientes del propio Gago y de los fallecidos por el accidente. Intervino justo al inicio del pleno Roberto García Gago, primo del cabo expedientado, para denunciar la intención de Defensa de querer «tapar» el caso de la fragata Extremadura .
En su interlocución directa a los ediles, recordó que el día del accidente Jorge «decatouse de que algo non ía ben» y «avisou con insistencia ao suboficial de que apagase o barco». Pero, continuó Roberto García, «ninguén lle fixo caso». El resultado fueron aquellas dos muertes. «Dende entón [el cabo Jorge Gago] sofre o perdurante recordo desa garda como un tormento», completó el familiar. Pero no sería lo único. La filtración de su testimonio sobre las posibles negligencias le valió el expediente disciplinario y «un calvario particular» en tanto que la Armada consideró injuriosas sus declaraciones.
«Se trata de un caso que está por encima de la política, y es preciso que se esclarezca», dijeron, en coincidencia, los cinco grupos políticos, aun con sus diferencias.