El presidente de la Xunta salió ayer en defensa de la normativa impulsada por su Gobierno, y aprobada en el Parlamento por todos los grupos, que consolida los sobresueldos de hasta 15.000 euros anuales para los ex altos cargos de la Administración. En la rueda de prensa que sucede a la reunión del Consello de la Xunta, Touriño manifestó que el personal beneficiario de las gratificaciones -funcionarios que fueron altos cargos durante dos años continuos o tres discontinuos- ya percibían este plus desde 1998.
El jefe del Ejecutivo mostró su malestar por la «desinformación» que, a su juicio, se está generando con el asunto y matizó que «este complemento de destino está recoñecido desde 1998» en Galicia, y desde 1991 para toda la Administración del Estado. Comunidades como Cataluña, Extremadura, Andalucía o Castilla y León aplican estos sobresueldos, argumentó Touriño, antes de subrayar que lo que se hizo en Galicia fue acabar con la «desigualdade» que existía entre lo que percibía un secretario xeral de la Xunta, por ejemplo, y el de un ministerio.
El presidente destacó que la equiparación salarial de los altos cargos tendrá un impacto limitado en las arcas públicas, que cifró en un sobrecoste de un millón de euros al año.
Un «privilexio»
Desde la Confederación Intersindical Galega (CIG) critican la actitud de Touriño, asegurando que hasta el momento existía una gratificación «en ningún caso consolidable, senón que se renovaba ano a ano», y que además no incluía al personal de otras Administraciones (como los ex alcaldes y los ex diputados). El secretario de Relacións Institucionais del sindicato, Bautista Vega, se lamentaba de que esta modificación de la Lei da Función Pública, en la que se consolida el plus de altos cargos «é a maiores dun privilexio, un acto propio de reximes tiranos e feudais».
Desde el Movimiento pola Igualdade do Emprego Público defienden una promoción entre el funcionariado basada en el trabajo y en el mérito «máis que no enchufismo político».
Respondiendo a las declaraciones de Touriño, explican que la consolidación de un plus de casi 15.000 euros «é totalmente novidosa»; que la cantidad establecida es superior (unos 3.500 euros), y que además por primera vez se incorporan a este complemento ex alcaldes y ex diputados, al tener que darles el mismo trato que a los altos cargos por la aplicación del estatuto básico del empleado público.