A CORUÑA | Una mujer, Rosa Arana Santiago, de 69 años, murió acuchillada, y otra, Visitación Fisteu Valiño, de 54, resultó herida tras el ataque que ambas recibieron en la tarde de ayer cuando entraban en sus casas -distantes apenas 200 metros- cargadas con las bolsas de la compra de un supermercado en el barrio coruñés del Agra. Fuentes de la investigación manejan como principal hipótesis del móvil el robo. La presunta homicida es otra mujer, que era buscada por las fuerzas de seguridad al cierre de esta edición. La primera agresión ocurrió en el número 3 de la calle Páramo, muy cerca de una zona comercial. Un vecino encontraba a Rosa Arana Santiago tirada en el suelo del portal, sobre un gran charco de sangre. El hombre avisó a la Policía Nacional, que se desplegó en la zona minutos después. Según testigos presenciales, Rosa Arana volvía de la compra cargada de bolsas. La vieron pasar y abrir el portal, y minutos después la encontraban muerta, con una profunda cuchillada en su garganta. Pasaba de las seis y media de la tarde. Agentes nacionales acordonaron inmediatamente la zona mientras en el interior del inmueble se analizaban el portal y la vivienda en donde residía Rosa Arana Santiago desde hace más de cuatro años, y que se encuentra situada en el primer piso. Los vecinos que se encontraban en la calle manifestaron que no oyeron ningún ruido ni grito. Los familiares de la mujer asesinada, que vivía en su casa con un compañero, llegaron escalonadamente hasta el domicilio y fueron informados por el juez de lo que había pasado. «Sólo nos dijeron que la habían encontrado en el suelo y que tenía una herida profunda en el cuello», señaló Fernando Jiménez, de 34 años, nieto de la muerta. Rosa Arana tenía cuatro hijos, dos de ellos son marineros y están en la actualidad embarcados. En el ascensor El segundo de los ataques ocurrió media hora después en la calle Francisco Añón. Visitación Fisteu Valiño, de 54 años, volvía también de hacer la compra en un centro próximo. La agresora la siguió desde este establecimiento hasta su portal, el número 33. Esperó a que abriese la puerta y se introdujo en el interior del edificio. En el descansillo, cuando esperaba el ascensor, recibió la primera de las puñaladas. La agresora la obligó luego a subir hasta su casa, situada en el cuarto izquierda, para que le abriese la puerta. En ese momento, Visitación Fisteu se resistió y forcejeó con la mujer. Fue entonces cuando recibió tres cuchilladas más. La asaltante huyó y la víctima bajó hasta el segundo piso para pedir auxilio, pero no había vecinos en ese momento. Como pudo, se desplazó hasta la calle, ensangrentada y tambaleándose. Allí recibió la ayuda de un trabajador de un taller de reparación de automóviles, que fue quien llamó a una ambulancia. La mujer, que fue trasladada al Hospital Juan Canalejo por la Cruz Roja, presentaba cuatro incisiones de arma blanca en la espalda. Ya en el centro sanitario, la mujer se encontraba consciente y orientada. Poco después, las fuerzas de seguridad encontraron en un contenedor frente al portal una camisa ensangrentada.