La cofradía de Ferrol descarta que haya una escalada de violencia por parte de furtivos
FERROL
La Cofradía de Pescadores de Ferrol descarta que los vigilantes del pósito se tengan que enfrentar a una escalada de violencia por parte de los furtivos, a pesar de que desde finales de mayo se han producido ya dos sabotajes a vehículos y una agresión física. Así lo considera el coordinador del mencionado servicio, Javier Mareque, señalando que las citadas situaciones se producen «por la actuación de gente concreta, de unos cuantos, y que además sabemos quienes son».
Estas declaraciones se producen después de que el pasado jueves el vehículo de uno de los vigilantes de la cofradía apareciese con las ruedas pinchadas y los cristales destrozados cuando el empleado del pósito se encontraba en la zona de O Pieiro para atender una alerta ante una posible esquilmación de percebe.
Mareque señala que la tendencia es justamente la contraria. Asegura: «Cada vez nos tienen más respeto, porque hay más conciencia de que hay controles respaldados por la Xunta». No oculta, sin embargo, que «en este oficio pasan estas cosas, no es la primera vez».