Al conselleiro de Medio Ambiente le costó ayer bastante entender la pregunta. Un periodista local demandaba conocer el estado de las gestiones para que la promotora que pretende explotar la mina de andalucita existente en Goente (As Pontes) pueda instalarse. Hasta tres veces pidió Agustín Hernández que le repitieran de qué era ese yacimiento antes de contestar: «Non teño ningún dato». El proyecto se encuentra actualmente pendiente de un informe ambiental favorable de su consellería para que el departamento de Industria pueda, a su vez, autorizarlo. Ante el desconocimiento de Hernández, el delegado de la Xunta en A Coruña, Diego Calvo, explicó que sí se habían mantenido conversaciones con la empresa Picobello Andalucita, S.L., una empresa coruñesa con financiación sudafricana y británica, pero que no se habían producido avances. La iniciativa empresarial pretende explotar el mineral existente en O Forgoselo, que se utiliza para obtener cerámicas especiales y su aplicación en ladrillos para revestimientos de hornos y moldes, y del que España importa el 100% de la producción. La espera para instalarse dura ya casi nueve años.
El alcalde de As Pontes, Valentín González Formoso, señalaba ayer que confía en que la administración autonómica desbloquee un proyecto que crearía medio centenar de empleos. El Concello ya ha puesto sus condiciones a la empresa: dar prioridad a los trabajadores de las compañías auxiliares y de Goente, poner especial cuidado en el procedimiento de compra de los terrenos y que se llegue a un acuerdo con la asociación vecinal para compensaciones en la parroquia. A todo ello, la compañía ya se ha comprometido.