Una broma muy peligrosa

Francisco Varela

FERROL

El instituto de Neda abre expediente sancionador a los dos alumnos acusados de la amenaza de bomba aunque sean castigados también por el Juzgado de Menores

14 may 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Pasado el susto de la amenaza de bomba que el pasado día 30 obligó al desalojo del instituto Fernando Esquío de Neda se ha puesto en marcha la maquinaria sancionadora contra los dos alumnos identificados como los autores.

Manuel Pita, el director del centro, ha explicado que se ha iniciado expediente administrativo sancionador. La reglamentación en vigor establece, para casos semejantes, castigos que van de 4 a 29 días de expulsión del instituto hasta el traslado de centro. Eso, al margen de lo que resuelva el Juzgado de Menores de A Coruña, que es el órgano judicial competente para resolver, una vez que la Fiscalía concluya la instrucción.

La Guardia Civil ha identificado a una joven de 17 años y a un chico de 13. Habría sido éste quien realizó la llamada telefónica que fue recibida por la bedel. Será, consecuentemente, solo la adolescente la única bajo la que caíga la jurisdicción de menores porque para edades inferiores a los 14 años no está prevista pena alguna porque carece de responsabilidad penal. Queda, no obstante, al albedrío de los padres y del propio centro escolar, que sí puede imponerle las sanciones que establezca la ley.

El director ha explicado también que el día del incidente no había muchos exámenes señalados, salvo algunas pruebas en cursos aislados. Sin embargo, la evacuación del centro y el posterior envío a sus casas de los 300 alumnos no fue tarea sencilla, recuerda Manuel Pita, ferrolano y profesor de Inglés en el Fernando Esquío. Solo uno de los servicios de transporte escolar no pudo adelantarse, si bien muchos alumnos, «como ahora todos tienen móvil», se pusieron en contacto con sus familiares que acudieron a recogerlos.

Al aparecer una caja sospechosa en uno de los baños femeninos hizo necesaria la intervención de guardias civiles expertos en explosivos. Fue todo un despliegue, hasta que se aclaró que todo había sido una broma, pero muy peligrosa.

Manuel Pita, que lleva tres años en el centro, asegura que es el incidente más grave ocurrido desde que ocupa el cargo de director. El delegado provincial de la Consellería, aquella mañana del 30 de abril, dejó precipitadamente un acto en el que se encontraba en Betanzos para trasladarse a Neda. Poco antes lo había hecho el inspector de Educación encargado del instituto.