Bernat Noel Tiffon, psicólogo forense, calificó ayer el caso del doble crimen de Lloret como un «suicidio ampliado». Según explicó en TV3, esto ocurre cuando el padre o la madre quieren suicidarse y como tienen miedo de dejar solos a sus hijos, optan por matarlos. Este experto señaló que la figura del suicidio ampliado se da también cuando la madre actúa con semejante violencia para proteger a sus hijos del padre. Sería el caso de Lianne Smith, que en el momento de la detención de su marido se enteró que este había abusado continuamente de su otra hija (fruto de un matrimonio anterior). Este descubrimiento fue un duro golpe para la mujer que, según los investigadores, sufre algún tipo de trastorno mental y se obsesionó con el asunto.
Temor a perder la custodia
Además, temía que los servicios sociales le quitaran la custodia de los menores, por lo que huyó en coche a Lloret de Mar, donde se instaló en un hotel y decidió acabar con todo. «Lo que haya podido pasar en la vida de esta mujer tal vez haya influido decisivamente en esta acción, pero no solo la relación con esta pareja, sino un conjunto de actos y situaciones vividas a lo largo de su vida», señaló la consejera catalana de Justicia, Montserrat Tura.
A la espera de las autopsias, todo apunta a que los dos niños murieron por la asfixia que les causó su madre con una bolsa de plástico. Las autopsias deberán determinar si Martin Anthony S. también abusaba de la pequeña de cinco años. La madre está a la espera de pasar a disposición judicial entre hoy y mañana, después de someterse a un examen psiquiátrico. Será entonces cuando deberá ratificar ante el juez la declaración que hizo a la policía: mató a sus dos hijos y luego intentó quitarse la vida.