El juez pide informes a Boeing y Spanair para determinar si se incumplió el protocolo de mantenimiento del avión
ESPAÑA
El titular del Juzgado de Instrucción número 11 de Madrid, Javier Pérez, que investiga el accidente del MD-82, ha solicitado informes a la compañía estadounidense Boeing, fabricante de la aeronave, y a Spanair, la propietaria, para dilucidar si el aparato estaba bien mantenido y revisado. El objetivo es aclarar si, como señala el borrador del informe de la comisión investigadora, la aerolínea incumplió el protocolo de mantenimiento que establece Boeing por no verificar antes del despegue el funcionamiento del sistema que avisa de que la configuración de la nave no es correcta.
El juez ha pedido a Boeing una copia del protocolo de actuación que el fabricante recomienda para un correcto mantenimiento de los MD-82, así como un ejemplar de la actualización de esos procedimientos que la compañía realizó tras el siniestro de agosto de 1987 en Detroit de otro MD-82, que dejó igual número de muertos que el de Madrid, 154. A Spanair, el juez Pérez le ha solicitado su protocolo particular de mantenimiento para este modelo, que después comparará con el que recomienda el fabricante para ver si hay diferencias notables, y el libro en el que constan todas las revisiones realizadas al aparato que se estrelló.
Con esos cuatro documentos sobre la mesa, el magistrado espera averiguar si es cierto que el manual de Boeing dice que hay que revisar el sistema sonoro de alertas antes de cada vuelo, y el protocolo de Spanair limita las inspecciones de ese sistema al primer vuelo del día o a aquellos casos en los que haya habido un cambio de pilotos.
El juez tenía previsto haber recibido ayer el informe preliminar de la comisión investigadora, que ha retrasado su aprobación tras la dimisión del representante de los pilotos. En su reunión de ayer, la comisión aprobó, en cambio, un comunicado en el que con las filtraciones «se ha violado el carácter reservado de la información», una acción «de tal gravedad» que ha decidido presentar una denuncia.
El juez Pérez inició ayer diligencias por un delito de revelación de secretos en relación con las filtraciones, sobre todo el vídeo de Aena que recoge el momento del accidente.