BNG, PNV y CiU exigirán que un nacionalista presida el Congreso

ESPAÑA

Galeuscat dice que tras el 9-M será un «cordón sanitario» contra el «virus centralista que propagan PSOE y PP»

14 feb 2008 . Actualizado a las 03:48 h.

«Galeuscat va a representar un cordón sanitario delante del virus centralista que propagan el PP y el PSOE en nuestros países y también en el resto de España». La plataforma nacionalista integrada por BNG, PNV y CiU expresó así ayer en Madrid su intención de sumar fuerzas tras las elecciones generales para ser determinantes en la política nacional, aumentar la descentralización e impulsar la creación de un Estado «plurinacional».

Los líderes de los tres partidos, Anxo Quintana (BNG), Íñigo Urkullu (PNV) y Artur Mas (CiU) criticaron por igual al PP y al PSOE por bloquear el desarrollo autonómico, y recordaron que han sido ellos los que han «sacado las castañas del fuego» a Zapatero firmándole con sus votos «letras a 90 días» para «salvarle en su pugna con la derecha montaraz», y a cambio solo han recibido «cheques sin fondos y muchos incumplimientos». «Esa fase se ha acabado», advirtió Artur Mas, que incidió por ello en que las próximas elecciones generales «no son cosa de dos, sino de tres», incluyendo a Galeuscat.

Ni Bono ni uno del PP

Para expresar ese cambio, los nacionalistas proponen de entrada que sea un nacionalista quien presida el Congreso en la próxima legislatura. Descartaron dar su apoyo «ni a José Bono ni a uno del PP» y tacharon de temeridad que Zapatero postule para el cargo al ex ministro de Defensa antes de celebrarse las elecciones. Ante la posibilidad de que Bono sea elegido para el puesto con los votos del PP, advirtieron de que el «gran reto» de Galeuscat es precisamente evitar cualquier acuerdo político entre el PP y el PSOE, «que tendría consecuencias muy negativas» para el desarrollo del Estado autonómico.

Los tres dirigentes anunciaron que se reunirán el 10 de marzo para coordinar su estrategia poselectoral, aunque tendrán libertad para pactar. En ese sentido, Quintana explicó que no hay un rechazo «atávico» hacia ningún partido. Afirmó que en este momento el PP se sitúa «en las antípodas» de Galeuscat, pero tampoco van a dar «un cheque en blanco al PSOE».