Mar vaticina nuevos cierres por una marea roja aún en fase ascendente

redacción / la voz

PONTEVEDRA CIUDAD

Recalca que se trata de un fenómeno natural frecuente en esta época

04 sep 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

De nuevo la toxina. La abundancia de células lipofílicas -las tradicionales diarreicas- ha obligado a prohibir la extracción de mejillón en dos tercios de los polígonos de bateas de las rías gallegas. Está cerrada toda la ría de Ares-Betanzos, toda la de Muros-Noia, la de Pontevedra al completo y más de la mitad de las de Arousa y Vigo. Y en breve podrían caer más, pues la marea roja presenta «una tendencia a durar», según explicó la directora del Instituto para o Control do Medio Mariño (Intecmar), Covadonga Salgado. El episodio tóxico es «ascendente», lo que implica que se agravará en las próximas semanas.

Las peores perspectivas son para los polígonos que están situados en la entrada de las rías, pues están expuestos durante más tiempo al episodio de lipofílicas y presentan una mayor concentración de fitoplancton tóxico en el organismo. «Este tipo de episodios tienen una perspectivas de semanas o meses», explica Salgado, pero hoy no se puede precisar el alcance exacto.

La directora del Intecmar insistió en que se trata de un fenómeno natural que se repite de dos a tres veces al año en la rías gallegas. Y es precisamente a final del verano y principios del otoño cuando suele manifestarse con mayor virulencia. Sin ir más lejos, a estas alturas del año pasado estaban cerradas el 80 % de las áreas de cultivo.

Arousa

En la ría de mayor producción de Galicia la toxina afecta a la mitad de sus 25 polígonos, con O Grove como epicentro. La asociación Amegrove lleva ya varios días sin poder descargar mejillón, pero su presidente Francisco Padín restaba ayer dramatismo a esta situación. «É algo co que xa contamos todos os anos, así que o temos previsto. Esperemos que remate pronto», indicó. La marea roja coincide con un momento óptimo de producción.

Pontevedra

La ría de Pontevedra ha sufrido numerosos cierres totales o parciales a lo largo del 2011. En estos momentos, todos sus polígonos están cerrados a la extracción. La toxina hizo sus primeros estragos el 18 en la ensenada de Bueu. Doce días después ya estaban afectadas todas las bateas. Cons de Udra, la principal agrupación de la ría, reúne a los propietarios de más del 60 % de las bateas pontevedresas. Un portavoz explicó que es pronto para poder valorar el impacto de esta nueva marea roja. Señaló que, aunque el sector se resentirá de los cierres, la repercusión sería mayor si ocurriese entre octubre y diciembre, cuando el mejillón alcanza mejores precios en fresco. Vigo

Los bateeiros de la ría viguesa aceptan resignados un fenómeno natural que ha irrumpido justo cuando estaban en plena campaña de exportación: «La naturaleza se pone así de rebelde y hay que resignarse, porque nadie es culpable de que ocurran estos hechos», explicó Rosendo Queimaño, gerente de la Cooperativa Socomgal de Moaña. «Al menos, las bateas del interior de la ría no ha sido necesario cerrarlas» y sigue habiendo producto.