La subida eléctrica supera ya el 18% y puede llegar al 25% en ocho meses
17 ene 2011 . Actualizado a las 11:45 h.Cuando en enero del 2010 la patronal del sector eléctrico, Unesa, cifró en un 30% la «subida necesaria» del recibo de la luz, las asociaciones de consumidores pusieron el grito en el cielo. El Gobierno se negó a comentar esa medida como una «posibilidad real», pese a que la Comisión Nacional de la Energía calificó el incremento como «indispensable» para afrontar el déficit de tarifa, una losa que pesa ya cerca de 20.000 millones de euros. Doce meses después, la realidad se impone, desmiente al Ministerio de Industria y les da la razón a las empresas de una manera aplastante.
A enero del 2011, las tarifas eléctricas han experimentado subidas cifradas entre el 18,95% para las viviendas con tarifa básica y el 21,43% del precio de las horas punta en los hogares con discriminación horaria (antigua tarifa nocturna).
Traducido a una familia media gallega -con una vivienda de 90 metros cuadrados, un consumo anual de 11.300 kilovatios y tarifa básica con calefacción eléctrica-, los nuevos precios vigentes desde enero del 2011 obligan a pagar 345 euros más este año, respecto al ejercicio pasado. La última subida aprobada en diciembre, del 9,8%, hace pensar que la revisión de tarifas que se realizará durante el próximo marzo no implicará nuevos incrementos, sobre todo por lo impopular que resultaría la medida a escasos dos meses de las elecciones municipales.
Pero el presidente de Unesa, Eduardo Montes, ya ha declarado que será «imprescindible» acometer más subidas a lo largo del 2011. La intención es dejar los precios un 30% por encima del registro marcado a principios del 2010. Eso implicaría que la misma vivienda gallega acabaría el año pagando 400 euros más que el año pasado por su consumo eléctrico.
Y el calambrazo de la factura eléctrica no será el único. Las familias tienen otro calvario casi mimético con el recibo del gas, la otra fuente energética domiciliaria por excelencia. Entre enero del 2010 y enero del 2011, el gas canalizado en la tarifa de último recurso se ha disparado un 6,25% en el término de potencia (fijo) y un 14.59% en el término de energía (variable que grava el consumo). Tomando como referencia la misma vivienda modelo gallega, la factura anual supondrá este año un desembolso 180 euros mayor que el pasado ejercicio. Como ocurre con la electricidad, el gas tenderá a seguir subiendo este año, en gran medida como consecuencia del alza del precio de las materias primas, en especial el petróleo, para el que se calcula una cotización este año de hasta 110 dólares por barril, desde los 85 del pasado diciembre. La tarifa gasista de último recurso se incrementó un 3,9% en enero. La denominada TUR 1, la que no incluye calefacción con gas, subió un 4,14%, lo que supone 0,56 euros mensuales de media por cada hogar. La TUR 2 (con calefacción de gas) subió un 3,87% y supondrá 1,66 euros al mes. A estas tarifas están acogidas unos siete millones de viviendas en toda España.
Tomando como referencia la misma vivienda modelo gallega, la factura anual supondrá este año un desembolso 180 euros mayor que el pasado ejercicio. Como ocurre con la electricidad, el gas tenderá a seguir subiendo este año, en gran medida como consecuencia del alza del precio de las materias primas, en especial el petróleo, para el que se calcula una cotización este año de hasta 110 dólares por barril, desde los 85 del pasado diciembre.
La tarifa gasista de último recurso se incrementó un 3,9% en enero. La denominada TUR 1, la que no incluye calefacción con gas, subió un 4,14%, lo que supone 0,56 euros mensuales de media por cada hogar. La TUR 2 (con calefacción de gas) subió un 3,87% y supondrá 1,66 euros al mes. A estas tarifas están acogidas unos siete millones de viviendas en toda España.