Un grupo de personal laboral del Instituto Enerxético de Galicia (Inega) y de la propia Consellería de Innovación concluyó ayer los trabajos de revisión de los anteproyectos presentados al concurso eólico. Los técnicos fueron convocados hace diez días para esta labor y se dedicaron durante ese período a puntuar a los aspirantes. Ayer terminaron de grabar los datos en soporte informático y a partir de ahí se elaborarán las tablas definitivas, tras el visto bueno de la comisión de valoración, que en estos diez días ha seguido de forma paralela con los trabajos.
Fuentes conocedoras del proceso explicaron que este grupo se ocupó de revisar los anteproyectos que salvaron la primera criba. Los empleados del Inega se ocuparon de analizar los aspectos técnicos de las candidaturas, mientras que los miembros de la consellería se encargaron de otros aspectos, como la capacidad económica o los planes industriales.
Los planes iniciales eran que este grupo de trabajo empleara una media hora en cada anteproyecto, pero una vez iniciados los trabajos se vio que este tiempo no era suficiente. Finalmente, se marcaron como objetivo dedicar una hora a cada candidatura. Para ello, los empleados tuvieron que pasar casi todo el puente de la Constitución en las dependencias de la Consellería de Innovación.