Venezuela encarga a Freire los tres mayores barcos oceanográficos hechos en España

ECONOMÍA

07 ago 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

El Gobierno de Venezuela quiere que los tres oceanográficos que forman parte del multipedido de cinco buques adjudicados al consorcio gallego de astilleros Vulcano-Freire sean los más modernos y los mayores que naveguen por sus dominios marítimos. Y lo serán, porque los tres barcos científicos que ya ha comenzado a diseñar Freire (los dos sísmicos que completan el pedido serán construidos en Vulcano) tendrán 90 metros de eslora, 20 más que el Sarmiento de Gamboa, buque insignia del Plan Galicia, construido también por Freire, y considerada la embarcación de investigación científica más moderna y completa de la flota oceanográfica española.

Los representantes de la Armada bolivariana que estuvieron visitando los astilleros vigueses -además de factorías Juliana, en donde se construirá uno de los tres buques científicos- tuvieron oportunidad de subir a bordo del Sarmiento de Gamboa y conocer todas las prestaciones, que serán reproducidas en el pedido venezolano.

La oficina técnica de Freire trabaja en el diseño de los barcos, que tendrán capacidad para operar con ingenios submarinos no tripulados (como el robot subacuático Víctor 6.000 , de patente francesa) capaces de descender hasta 6.500 metros de profundidad.

Siguiendo el esquema del Sarmiento de Gamboa, las nuevas naves contarán con una tripulación de aproximadamente 15 personas, a las que se sumará un colectivo de alrededor de 25 científicos que se encargarán de las labores de investigación multidisciplinar para las que se están diseñando los buques.

Además de los 90 metros de eslora (récord en esta gama de embarcaciones) el diseño incorpora propulsores diésel eléctrico de bajo ruido y vibraciones -según recomienda el Consejo Internacional para la Exploración del Mar (ICES)-, sistema de posicionamiento dinámico y cubiertas reforzadas con capacidad para que maniobren robots y vehículos submarinos preparados para descender hasta los 6.500 metros.

Los barcos se construirán con doble quilla retráctil, góndola acústica y tecnología que permitirá cartografiar el fondo y el subfondo marino, realizar estimaciones de biomasa, determinar corrientes o fijar el posicionamiento de vehículos submarinos operados por control remoto.

Sobre la inversión que el Gobierno de Hugo Chávez tiene previsto destinar a esta parte del pedido, la Armada de la República Bolivariana no ha querido dar información al respecto. La única referencia existente es que el coste del Sarmiento de Gamboa superó la cifra de los 22 millones de euros, aunque en este importe no aparece incluida la inversión correspondiente al equipamiento científico y tecnológico, por lo que es muy probable que la factura final correspondiente a cada buque sea considerablemente más elevada.

Flota científica

¿Cuál va a ser el uso que el Gobierno de Venezuela tiene previsto dar a la nueva flota científica? El contralmirante Juan Carlos Torres, director de Logística del Estado Mayor Naval de la Armada venezolana, ha explicado que uno de los oceanográficos estará equipado con casco reforzado y helipuerto para navegar al Antártico. «Esto permitirá tener una plataforma propia en la que podamos trasladar a nuestros científicos», afirmó. En realidad, una de sus principales misiones será la de complementar con información científica la labor de prospección y búsqueda de petróleo que realizarán los dos buques sísmicos que completan el multicontrato.

Estas dos embarcaciones de apoyo a plataformas petrolíferas serán construidas en las instalaciones de Vulcano.

El calendario de entrega de los cinco barcos contratados, en principio, no debería de superar los dos años, aunque el plazo dependerá de la llegada de los equipamientos de propulsión y tecnología de las embarcaciones, que serán suministrados por proveedores alemanes, franceses y nórdicos.