El Balonmán Lalín ofreció su mejor cara ante el Teucro, con el que perdió de uno

L.G.C.

PONTEVEDRA CIUDAD

20 ago 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

El BM Lalín de Primera Nacional debutó ayer ante sus aficionados. Los rojinegros disputaron su primer partido amistoso en casa ante el Teucro de División de Honor B en un encuentro que sirvió para ver una muy buena cara a los locales. Los pupilos de Alberto Miguélez perdieron 22-23 un partido que tuvieron en su mano y que destacó por su gran disputa y por la igualdad.

Los dos contrincantes plantearon un partido muy serio y en el que las defensas fueron las grandes protagonistas. La retaguardia 6:0 que plantearon los lalinenses detuvo con éxito el ataque pontevedrés. Los lalinenses jugaron los 20 primeros minutos con gran intensidad y concentración y no permitieron al Teucro sacar ventajas importantes. Solo un bajón de rendimiento de los locales en los últimos minutos de la primera mitad permitió a los de Modesto Augusto ir al descanso 7-10.

Tras la reanudación, más de lo mismo: los dos equipos con defensas férreas y bien plantadas. Al Lalín se le atragantó más el trabajo en ataque, pero aún así llegó a ponerse por delante en el marcador. El Teucro consiguió la remontada al tener más éxito que los dezanos en las labores de contraataque, firmando el tanto de la victoria a falta de 20 segundos para el remate del amistoso.

Por el Lalín jugaron: Bruno (2), Roibás (2), Nico (1), Adrián (1), Sergio, Porto (2), Uxío, Rubén (1), Cristian, Martín (11, 8 de penalti), Roberto Granja, Marco, Pablo, Durán y Iago. Por el Teucro: Toño (1), Pombo (2), Roberto Álvarez (1), Carlos (2), Edu, Chapela (1), Bozalongo (2), Borja (6, 3 de penalti), Tomás, Borrás (4), Tsivanev (3), Calderón, Martinovic, Mouriño y Tomás.

Uno de los protagonista de la tarde fue Rubén Martínez. El jugador del Nattex volvió a vestir la camiseta del BM Lalín después de una temporada sin jugar en Nacional. Con su participación con el equipo de Alberto Miguélez se escenifica el convenio de filialidad de Nattex y BM Lalín. Borja, Mouriño y Álvarez también regresaron a casa, pero con la camiseta del Teucro.