A Estrada tuvo un «xeral do Ulla» de verdad, pero no pasó de teniente

Sánchez C.

DEZA

Felipe Constenla, un joven estradense que estudiaba en Santiago, se alistó en 1808 en el Batallón Literario, y participó después, como oficial, en numerosas batallas

06 ene 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

El último número de la publicación Miscelánea Histórica y Cultural de A Estrada , incluye un amplio estudio sobre un personaje real del pasado estradense, que bien podría ser catalogado como lo más parecido a uno de esos xerais do Ulla que serán protagonistas en los próximos carnavales. Nuestro hombre, nacido posiblemente en la zona de Vea en el año 1788, llegó a teniente, y se significó por su brava lucha contra las huestes de Napoleón, o de su hermano Pepe Botella. Se llamaba Felipe Constenla y Garrido.

Un descendiente suyo, José M. Pena García -de padre estradense, pero residente ahora en Oviedo- ha realizado un profundo estudio sobre su vida, hazañas y desventuras, que todos los estradenses pueden leer en Miscelánea . Cuenta inicialmente que Felipe Constenla era estudiante en Santiago cuando se produjo el levantamiento del 2 de mayo, en 1808. Con sólo 20 años, se alistó -junto a otros 1.200 jóvenes- en el conocido Batallón Literario, que organizó en Marqués de Santa Cruz (de Rivadulla) para hacer en Galicia la guerra contra los franceses. El portaestandarte de aquel pequeño ejército era José Dionisio Valladares, padre de Marcial Valladares.

Escaramuzas en Vea

Estuvo Felipe Constenla unos seis meses en dicho batallón, del que apenas sobrevivieron, tras muchas escaramuzas, unos 300 integrantes. Tras una retirada en León, se une a la guerrilla de su comarca, ejerce de instructor y ya es considerado un mando.

Con esa guerrilla participa en escaramuzas en la zona de Vea, en 1809. Pasa después al regimiento de La Unión, siendo ya subteniente y actuando en la zona de Santiago.

Participa en la gran batalla de Ponte Sampaio, que permitió echar a los franceses de Galicia. Pero este estradense se empeño en perseguirlos. Participó, siempre como instructor y teniente, en diversas batallas en todo el norte peninsular.

Prisionero, y desdichas

Fue hecho prisionero por los franceses en dos ocasiones, y en ambas pudo escapar. Acabó formando parte del ejército del Norte, de Mendizabal, y fue uno de los que persiguió a las huestes de Napoleón incluso dentro de territorio francés. Acabada la guerra, recibió distintas condecoaraciones, pero su espíritu liberal y reformista impidió que el rey Fernando VII le concediera el ascenso que sus mandos pedían para él, para ser capitán. El propio Felipe Constenla reivindicó sus derechos una y otra vez, y dirigiéndose al rey, lo que le costó un consejo de??guerra.

Continuó su carrera militar, como teniente y defendiendo la causa liberal, pero con más pesares que los que sufrió en el campo de batalla. Murió antes de los 40 años, por unas úlceras que ya padeció durante la contienda y años posteriores.

En la lucha de los gallegos contra el ejército de Napoleón tuvieron también relevancia las guerrillas de las zonas de A Estrada y Cuntis, que, una vez que los franceses ganasen una batalla en Cacheiras e iniciarán una marcha hacia Pontevedra y Vigo, tendieron emboscadas a destacamentos rivales.

En el puente de Pontevea hubo emboscadas y escaramuzas. Se repitieron en una cuesta entre San Andrés de Vea y Portela (Cuntis), destacando la participación de las cuadrillas donde se significó el cura Pego. Los franceses acabaron atravesando la comarca. Se encontrarían después con Ponte Sampaio.