Un gallego, rey del juego limpio

rubén ventureira A CORUÑA / LA VOZ

DEPORTES

Chao, técnico del Sevilla alevín, cedió un título al Espanyol porque fue mejor

21 jun 2011 . Actualizado a las 10:56 h.

No fue Fabri, que ascendió al Granada a Primera, el único entrenador gallego triunfador del fin de semana. En el torneo alevín de Iruagi (Guipúzcoa), Ernesto Chao, técnico del Sevilla y natural de Ribadavia, decidió dar la copa que acababa de ganar a su rival, el Espanyol, «porque fue mejor». Ayer, su móvil tuvo que ser recargado en varias ocasiones: sufrió un acoso mediático gracias a su lección de deportividad. «El fútbol te devuelve mucho cuando das ejemplo. Un simple gesto deportivo, que entendimos que había que hacer porque era de justicia, nos ha dado mil veces más que si nos hubiésemos llevado la copa a Sevilla. Hemos salido hasta en los telediarios. Estamos muy orgullosos porque es una lección para los chavales», reflexionaba el técnico gallego a última hora de la tarde.

En la final, el Sevilla empezó perdiendo 2-0, pero logró remontar hasta colocarse 2-4. «Ellos tuvieron una gran reacción y nos empataron en los cinco últimos minutos», apunta Chao. En ese tramo final, sus jugadores no recurrieron a ningún truco para frustrar esa avalancha rival: «Les he advertido muchas veces de que no hay que perder tiempo. Les he prohibido hasta que se tiren. De hecho, uno de nuestros jugadores se llevó un pelotazo y empezó a sangrar, pero se quedó de pie, salió del campo y volvió cuando estuvo recuperado», asegura Chao.

Decisión meditada

El 4-4 final obligaba a decidir el torneo a los penaltis. En ese momento, Chao pensó que si tenía que haber un ganador ese tenía que ser el rival: «Todos los equipos que han participado en el torneo, y ahí estuvieron Barcelona, Valencia, Real y Athletic, entre otros, eran alevines de segundo año. Los del Espanyol eran de primer año, de 10 y 11 años, y jugaron de maravilla».

Tras hacer esa reflexión en la banda, Chao consultó con sus jugadores, niños de 11 y 12 años a los que ha inculcado los valores de la deportividad. «Les pregunté si no creían que ellos habían sido mejores. ?Nos han vuelto locos?, me contestaron. Así que pensé que la copa tenía que ser para ellos». Se acercó al técnico rival, David Fernández, y le dijo: «Hemos decidido que la copa sea vuestra. Si queréis, no tiramos los penaltis y os la lleváis». Pero el técnico rival prefirió que se realizase la tanda: «Me dijo que a ver si el hecho de no tirarlos iba a ser malinterpretado y se iban a pensar que tenían miedo a tirarlos».

Los valores del deporte

Así que se lanzaron los penaltis. Y ganó el Sevilla. Y Chao habló con la organización y decidió que fuese el Espanyol el que subiese a recoger la copa de campeón. Así ocurrió. David Fernández, técnico perico, no daba crédito. «Ha sido un gesto increíble. Llevo algunos años como entrenador, pero nunca había vivido una situación igual. Es una manera preciosa de entender el fútbol», declaró Fernández en la web del Espanyol.

«Yo insisto a mis jugadores en que el fútbol tiene que ser justo y que los valores del deporte tienen que estar por encima del resultado. Así que lo que decidimos fue lo más coherente», argumenta el entrenador gallego.

Chao nació en Ribadavia en agosto de 1963. A los dos meses, su familia se trasladó a Andalucía: «Pero yo me sigo sintiendo profundamente gallego. De hecho, sigo teniendo allí muchos parientes y seguimos vinculados a la empresa familiar, Ataúdes Chao», detalla Ernesto, que es ahijado del actor Ernesto Chao, hermano de su padre.

Tras jugar, primero, y ejercer de técnico, después, en el Colegio Clavet, dio el paso al Sevilla, donde lleva nueve años trabajando, de entrada con los benjamines y en los dos últimos años con los alevines. No es la primera vez que Chao ofrece una lección de deportividad. La pasada temporada, en la final del campeonato alevín de Andalucía, el Sevilla se colocó 3-1 contra el Séneca, pero este equipo protestó porque ese tanto llegó cuando varios rivales entendían que el juego estaba parado. «Nos dejamos meter el 3-2. Y ganamos 4-2. El fútbol es justo».

Ernesto Chao lleva nueve temporadas en las categorías inferiores del Sevilla