El Cangas solo le resistió diez minutos al entonado Valladolid

Efe

VIGO

15 oct 2009 . Actualizado a las 11:50 h.

El Pevafersa arrolló a un débil Cangas que solo aguantó los diez primeros minutos, tras una buena salida, si bien el conjunto vallisoletano no completó un buen partido, ya que perdió la tensión y cometió numerosos errores, que impidieron que la renta fuera más abultada.

Los gallegos mantuvieron el tipo en los primeros compases del partido, merced al acierto anotador de Soliño y a una buena defensa, pero el Pevafersa, aunque entró algo frío en el juego, fue poco a poco adquiriendo ritmo, aumentó la tensión defensiva, con Ávila como avanzado en el 5:1, e inició un partido en solitario.

El Frigoríficos del Morrazo tiró la toalla muy pronto y, con sus numerosas lagunas defensivas y los fallos en los lanzamientos, propició los contraataques del cuadro local, protagonizados por sus extremos -Rentero y Chuchi Martínez-, y el inicio del declive de los gallegos.

El Pevafersa se convirtió en dueño y señor del juego y, con un Cangas derrotado antes de tiempo, llegó al descanso con una ventaja de ocho goles (18-10).

Tras la reanudación la situación continuó por los mismos derroteros, con un Frigoríficos Morrazo totalmente abatido, sin ideas en ataque, sin capacidad defensiva y sin tensión, lo que aprovechó el conjunto vallisoletano para ampliar las diferencias (27-13, min.43).

Ante la ausencia de Curro Luzena, sancionado, el segundo entrenador, Eusebio Tilves, solicitó un tiempo muerto para intentar encauzar el juego de su equipo, pero no sirvió de nada, ya que el cuadro gallego siguió adoleciendo de falta de intensidad y, además, Svensson tampoco les permitió aprovechar los fallos locales.

La renta vallisoletana alcanzó los 16 goles (29-14) y, a partir de ese momento, ya no hubo partido, ya que el Pevafersa también bajó los brazos y el juego, ya de por sí caótico, se convirtió en un cúmulo de despropósitos en uno y otro bando, que favoreció al conjunto gallego, ya que pudo reducir el marcador (30-19).

En un partido totalmente anodino, el Pevafersa pudo recuperar la senda de la victoria (34-22), tras cosechar un empate ante el CAI Aragón y caer ante el Ademar de León en los últimos encuentros, a costa de un Frigoríficos del Morrazo sin margen de maniobra.

Los de Cangas continúan sin conocer el triunfo y en la próxima jornada reciben al Toledo en O Gatañal, todo el mundo considera ese partido como clave para despegar hacia la permanencia.