La Secretaría dice que no financiará el encuentro, y la FGF, que no puede asumir los costes de organización
18 sep 2009 . Actualizado a las 14:53 h.El partido de la selección gallega absoluta de fútbol ha dejado de ser una prioridad con el cambio de Gobierno en la Xunta de Galicia, y más en los tiempos de crisis económica actuales. Ninguno de los dos actores principales en la organización y celebración del partido (Secretaría Xeral para o Deporte y Federación Gallega de Fútbol -FGF-) ha mostrado un interés real en su celebración hasta el momento, por lo que el evento permanece en suspenso a estas alturas de año.
El secretario xeral para o Deporte de la Xunta, José Ramón Lete, aseguró ayer que el Gobierno gallego no colaborará económicamente en la organización del partido, que corre a cargo de la FGF. «La Xunta apoya las selecciones gallegas y cualquier evento deportivo que sirva de promoción a Galicia, pero no consta una demanda de celebración de este partido ni por parte de los clubes ni de la FGF. En el caso de que la federación reclame la organización y celebración del encuentro de la selección gallega absoluta de fútbol, la Xunta lo apoyaría y estaría representada en el evento, pero nunca en forma de financiación, ya que no es el mejor momento económico para ello».
La Ley 11/1997, General del Deporte en Galicia establece en su artículo 11.1.a que «será competencia de la Administración autonómica autorizar la realización de actividades deportivas y la celebración de competiciones que afecten a las competencias propias de las federaciones deportivas gallegas en el ámbito de la Comunidad Autónoma» y en el 32.k. que «corresponderán a las federaciones deportivas gallegas como competencia exclusiva en su respectiva modalidad deportiva las funciones de representar a Galicia en actividades y competiciones deportivas de carácter estatal o supraestatal organizando las selecciones autonómicas».
Dar ejemplo de austeridad
Así, el presidente de la Federación Gallega de Fútbol, Carlos Meana, explica que no ha recibido comunicación alguna por parte de la Secretaría Xeral, recuerda que es la Xunta la que tiene la última palabra sobre el evento y asegura que «la federación no va a gastar una cantidad importante de dinero para organizar un partido como ese en diciembre, cuando en los tiempos que corren los recursos económicos de la FGF son más necesarios en otros ámbitos del fútbol gallego». En este sentido, incide en «la delicada situación económica de muchos de los clubes gallegos que compiten bajo nuestro amparo». «Debemos dar ejemplo», concluye el mandatario federativo.
Carlos Meana recuerda que «la financiación principal de esos partidos provenía de la Fundación Deporte Galego, pero ese acuerdo expiró con la legislatura anterior». Además, el presidente de la FGF explica que «conseguir los recursos económicos necesarios para la organización de un partido como este es muy complicado, sobre todo tal y como está la situación económica hoy en día». «Por el momento, la FGF se mantiene a la espera, pero a día de hoy no hay nada al respecto», zanja.
La selección gallega de fútbol ha disputado cuatro partidos en su etapa moderna: contra Uruguay (San Lázaro, 2005), Ecuador (Riazor, 2006), Camerún (Balaídos, 2007) e Irán (Riazor, 2008).