Barja reitera su propuesta de que la residencia sea pública y que se construya por partes

La Voz

A CORUÑA

16 jun 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

«Bastante hemos hecho con tranquilidad y paciencia, además de aguantar cosas que no teníamos que aguantar, porque culpas tenemos las justas». De esta forma explicaba ayer José María Barja cómo se sentían en la UDC tras el anuncio de la Xunta de renunciar al concurso para la construcción de la residencia universitaria de Elviña, y su intención de abrir una nueva convocatoria para que una empresa privada construya y gestione el inmueble.

Destacó que desde la institución académica «se ha hecho siempre lo que nos han pedido, incluso el Consello de Goberno aprobó un documento en el que nos comprometíamos a hacernos cargo de la gestión de la residencia». Reiteró su propuesta de que el edificio se construya por partes, si no se cuenta con dinero para realizarla, y recordó que los terrenos fueron expropiados para hacer una residencia pública.

Decisión equivocada

Además de los distintos grupos de estudiantes que criticaron la actuación de la Xunta, el partido Unión Coruñesa emitió ayer un comunicado en el que califica la decisión como «equivocada, y supone un nuevo palo en las ruedas del desarrollo de una Universidad emergente».