El juzgado deniega a Oleiros la reclamación de casi 600.000 euros a la mancomunidad

Susana Acosta
Susana Acosta A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

30 mar 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

El contencioso administrativo número 1 de A Coruña denegó al Concello de Oleiros los casi 600.000 euros que reclamaba por la deuda que contrajo Cambre, Culleredo, Carral y Abegondo por la creación de puntos limpios a través de la Mancomunidad de Municipios. El alcalde de Oleiros, Ángel García Seoane, también incluyó en la denuncia al Ayuntamiento de A Coruña porque su alcalde, Javier Losada, era el encargado de convocar el pleno para resolver esta situación al ser el presidente del antiguo organismo supramunicipal. Ahora el juzgado no le da la razón al regidor oleirense, aunque no es una sentencia definitiva y cabe recurso de reposición.

La Mancomunidad de Municipios aprobó hace años un proyecto de financiación europeo gestionado por Oleiros para crear nueve puntos limpios y adquirir material del servicio de basuras. Pero cinco municipios no cumplieron con los plazos fijados por la UE por falta de suelo municipal. Ante esta situación, perdieron más de 300.000 euros de financiación,

Oleiros pide a los cuatro municipios 469.753 euros, además de 120.462 euros de intereses que reclaman las adjudicatarias de los trabajos. Ya en su día, García Seoane, apuntó como mayor responsable al alcalde de A Coruña por no convocar el pleno de la Mancomunidad para saldar la deuda.

Oleiros considera que tuvo que recurrir a los juzgados después de que se solicitase «durante años» a Losada una reunión que nunca llegó.

Urbanización Montegolf

Asimismo, el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia desestima la solución que el Concello de Arteixo propuso a la urbanización Montegolf en el 2005. El tribunal denegó la inscripción del residencial en el registro de entidades colaboradoras para que el Concello corriese con los gastos de mantenimiento de las áreas comunes pero no contó con el beneplácito de la Xunta.

El problema surgió después de que se construyesen las viviendas, cuando la promotora y el Concello acordaron crear una entidad de conservación por la que la empresa se haría cargo de las zonas comunes pero cuando vendieron las casas, estas obligaciones fueron transmitidas en escritura pública a los propietarios. El anterior alcalde, Manuel Pose, les propuso cambiar los estatutos, una vez inscrita la entidad, para que fuese el Concello el que asumiese la manutención del complejo. Cuando la Xunta no dio el visto bueno a este acuerdo, el Concello presentó un recurso contra esta decisión. El TSXG dice que ahora que el complejo no puede inscribirse en una entidad de conservación.

Las protestas de los residentes en Montegolf se remontan al 2004 por el mantenimiento de las áreas comunes.