Los obreros del pop que no persiguen el dinero de sus fans

Javier Becerra
JaVIER BECERRA A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

14 mar 2011 . Actualizado a las 13:22 h.

«Puedes bajarte la maqueta gratis, no queremos tu sucio dinero». De este modo saludan los componentes de Mano de Obra desde la plataforma de Internet Bandcamp a los interesados en escuchar o descargar su música. Allí se encuentran los seis temas de Cobra EP, la carta de presentación de Coco, Alberto y Víctor. El primero canta y toca el bajo, el segundo le da a la batería y el tercero es teclista. Coco y Alberto no habían cogido un instrumento en su vida. Víctor militó en los desaparecidos Verano en Lisboa y mantiene Mecánica Celeste, su proyecto en solitario. Los tres adoran el tecno-pop ochentero. Y, muy especialmente, a Aviador Dro.

«Empezamos en octubre del año pasado», precisa Alberto, ilustrador de profesión y futbolista en sus ratos libres. Precisamente, su mala suerte en el futbol fue lo que lo llevó a Mano de Obra: «Me lesioné jugando y pensé que tenía que hacer algo con mi tiempo. Me metí a clases de batería. Siempre lo quise hacer y ahí tuve una excusa perfecta».

Así, junto a sus dos compañeros, se embarcaron en este proyecto de inspiración claramente ochentera. «Los tres coincidimos en el gusto por ese sonido gris. Hablo de grupos como Aviador Dro, Parálisis Permanente o Décima Víctima». La otra pata se encuentra en la literatura: «Nos interesa mucho la literatura distópica; libros como 1984, Un mundo feliz o Farenheit 451 son una gran fuente de inspiración».

Con esas claves, Mano de Obra se sumergen en todo tipo de temáticas con la coartada de la ciencia ficción. «Hablamos de cosas de la actualidad que nos interesan. A los tres nos gusta la ciencia ficción y así podemos tratar lo que queramos. Nosotros, por ejemplo, hablamos en nuestras canciones a Egipto, pero antes de Mubarak».

«La ciencia ficción te permite crear mundos paralelos -continúa Alberto- y puedes tocar cosas cercanas con mucha más fuerza que si hablases directamente de ellas. Es una forma de esconder lo que quieres decir y que lo interprete la gente». Y ahora, que estamos en época preelectoral, ¿se ocultarán entre alfas y omegas Losada, Negreira o Carril? «No, de política municipal pasamos por ahora -se ríe-, nosotros vamos a lo mundial y global».

Directo

Con tan poco tiempo de andadura los directos de Mano de Obra se reducen a tres. «El último concierto lo dimos en el Fórum. Sonaba muy bien, había muy buen rollo y la gente estuvo genial. Para hacer nuestra música no hace falta ser un virtuoso y creo que lo defendemos bastante bien. En directo vamos con los monos de obra, así en plan industrial y, si nos dejan poner diapositivas, tenemos un montón de ellas con mucha carga».

En esos directos se pueden disfrutar de las nuevas canciones, las que formarán parte de su nueva maqueta. «Seguimos, más o menos, por el mismo camino -aclara Alberto-. En las letras mantenemos el tono de ciencia ficción. Musicalmente las nuevas canciones no son tan punk. Por ejemplo, no utilizamos el bajo con distorsión, sino que lo hacemos limpio. Metemos recursos de otros géneros, como puede ser el hardcore, el post-rock o el sonido industrial».

En los próximos meses habrá nuevos conciertos. «Nos encantaría telonear a cualquier héroe de los ochenta, pero la mayoría ya no funcionan en vivo», asegura Alberto.