Lo social se impone a lo festivo. Ese el el principal argumento expuesto por Javier Losada para justificar la decisión de suprimir este año el Noroeste Pop Rock. Tal y como indicó el concejal de Fiestas, Carlos González-Garcés, este evento rondaría unos 700.000 euros. Ante los micros de Voces de A Coruña, el programa dirigido por Pablo Portabales en Radio Voz, Losada puso dos ejemplos sobre lo que supone esa cantidad de dinero: «Con el ahorro del Noroeste Pop Rock se puede hacer medio centro cívico o multiplicar por tres las comidas que se les dan a las personas mayores».
El regidor aseguró que la medida se tomó con responsabilidad y que, de no hacerlo, la sociedad se lo iba a reprochar: «Si lo mantuviéramos coincidiendo con el otro concierto -se refería al África Express que tendrá lugar en Santa Cristina el 7 de agosto-, nos acusarían de falta de coordinación y de tirar el dinero en momentos de crisis».
En sentido diferente se posicionan sus socios de gobierno. La concejala de Participación Ciudadana, la nacionalista Margarida Vázquez, expuso la postura del BNG: «Non estamos de acordo coa non celebración no Noroeste. É unha mala noticia xa que se trata de un festival con grande raigame». La edila comprende, no obstante, que la situación económica tiene que afectar a las fiestas. «Todos somos conscientes de que este ano íase dar unha baixada nos orzamentos», señaló. Por ello, la opción del BNG es la de una reducción proporcional: «Apoiaríamos un recorte sen que iso signifique a desaparición do evento».
Desde las tiranteces por la ordenanza del gallego en marzo y los desencuentros sobre la necesidad de una exposición pública del PGOM en abril, no se había producido un desencuentro en el gobierno municipal.